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La lluvia hizo presencia este martes en el estadio Victoria de Girón. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 05:47 pm
MATANZAS.— Una vez más, la lluvia cobró protagonismo en la definición de la pelota cubana. Habrá quienes saquen sus particulares cuentas, digan que este paréntesis temporal beneficia a uno u otro contrincante, pero lo cierto es que el duelo suspendido la víspera solo perjudica el buen espectáculo que había comenzado a «cocinarse» en esta ciudad.
El graderío del Victoria de Girón volvió a albergar una notable concurrencia, fiel hasta el mismo momento que anunciaron por la amplificación local que todas las acciones quedaban pospuestas para hoy, también a partir de las 7:15 p.m.
Hasta ese momento, el pulso entre el abridor visitante Vladimir Baños y el local Joel Suárez parecía enteramente disfrutable, aun cuando la novena vueltabajera había abierto fuego en el segundo capítulo.
Pero el torrencial aguacero caído por estos lares hizo estéril el cañonazo impulsor de David Castillo con hombres anclados en las esquinas del terreno. Entonces, borrón y cuenta nueva en esta historia, extendida y tal vez hoy con nuevos protagonistas sobre la lomita. Pero de seguro, igual de interesante. Crucemos los dedos, «soplemos» las nubes y esperemos.
