Gay es el segundo atleta más rápido de la historia. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 05:10 pm
Después de un sábado supersónico en Eugene, Oregon, durante la cuarta parada de la Liga de Diamante, el subcampeón mundial de Berlín 2009, Tyson Gay, impuso un registro de miedo en los cien metros planos (9:79 segundos) en el mitin atlético de Clermont, Florida. Con este resultado se encaramó al primer puesto del ránking mundial del año.
El tiempazo esbozaba un mensaje harto legible: «el más rápido de este año soy yo», pues horas antes el jamaicano Steve Mullings había conseguido la mejor rúbrica de la temporada (9:80) en la reunión más brillante del deporte rey.
Si bien la prestigiosa liga con nombre de gema había sido escenario de un fin de semana espectacular en los eventos de velocidad, cuando se impusieron cinco marcas para la temporada, dos para la competencia y diez firmas escalofriantes en el hectómetro, Gay dejó bien claro el pleno dominio que ostenta desde hace diez meses.
El también campeón del Mundial de Osaka 2007 puso fin a dos años de victorias ininterrumpidas del hombre más veloz de la historia, el 6 de agosto pasado, en Estocolmo, cuando venció por primera y única vez en su carrera al jamaicano Usain Bolt, con un registro de 9:84.
Gay se erige como el segundo atleta más veloz del orbe gracias a su tremendo crono de 9:69, conseguido el 20 de septiembre de 2009 en Shangai, China.
Ahora los vaticinios del próximo enfrentamiento entre estos dos astros de la velocidad se muestran algo opacos, y el morbo aumenta mientras se espera el ansiado duelo. ¿Podrá el antillano, tras once meses de ausencia, con el empuje del correcaminos norteño?
Bolt, plusmarquista mundial en el hectómetro (9:58) y monarca planetario y olímpico de cien y 200 metros lisos, presenta este año un registro de 9:91 conseguido el 31 de mayo en el mitin Zapatillas Doradas, en Ostrava, República Checa.
En tanto, el estadounidense competirá el sábado próximo en el quinto episodio de la Liga de Diamante, con sede en Nueva York, Estados Unidos. ¿Podrá mejorar sus impresionantes números?