Idalis Ortiz, medallista de bronce olimpico y mundial, es una de las esperanzas cubanas en Londres. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
La habitual invitación «habla» por sí sola. Y la federación japonesa de judo ya se la cursó a su similar de Cuba, para intervenir con cinco atletas en el II Grand Slam de Tokio (antigua Copa Jigoro Kano), que se desarrollará del 11 al 13 de diciembre venidero.
Este es uno de los cuatro certámenes anuales de similar categoría, en el que tradicionalmente exhiben sus halones e ippones los primeros judocas del ranking mundial en cada división. Entonces, con la invitación no solo se garantiza la calidad, sino que también se reconoce el aval de los cubanos.
Por su trayectoria internacional, los medallistas olímpicos y mundiales Yanet Bermoy (52 kg), Idalis Ortiz (más de 78 kg) y Oscar Braison (más de 100 kg), fueron los escogidos para encabezar el quinteto criollo.
Pero en la comitiva se enrolarán también Yaritza Abel (63 kg), la figura menos experimentada que parece haber llegado a planos estelares, y Oreidis Despaigne (100 kg), terceros ambos en el Campeonato Mundial de Tokio 2010.
La actuación cubana en el I Gran Slam de la capital nipona celebrado el pasado año dejó mucho que desear. Allí, Bermoy, Ortiz y Braison, los tres invitados, no se pudieron hacer justicia y cedieron «bien temprano» ante los exigentes rivales japoneses en sus respectivos grupos eliminatorios.
Los avezados técnicos Ronaldo Veitía y Justo Noda, son testigos del alto nivel competitivo que enfrentarán sus discípulos. Y como ya conocen a la gran mayoría de los rivales, no albergo dudas de que el diseño técnico ya está «montado» según el oponente de turno. Entonces, esperemos una grata sorpresa entre ippones y wazaris.