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Los naranjas derrotaron a los tigres ocho carreras por cero

Sin quitarse el polvo del camino, Villa Clara venció a Ciego de Ávila, ocho carreras por cero, y la semifinal oriental arrancó con sabor a naranja. Mientras, llovió de nuevo en San José y el segundo choque de Occidente se jugará hoy a las 5:00 p.m.

Los visitantes le marcaron una raya a los «tigres» en el primer capítulo, por cañonazos de Martín y Zamora y roletazo al cuadro de Borrero. No lo sabían, pero al final eso sería suficiente.

El clímax del choque llegó en el cuarto episodio, cuando Ciego llenó las bases sin outs y no pudo anotar. Ahí entró a lanzar Yasmani Hernández y colgó un cero de espanto. Fue un cubo de agua fría y los locales no se recuperaron.

Crecido, Villa Clara atacó enseguida con bambinazo de Borrero, y luego Ramón Lunar le robó un jonrón a Adonis García en el jardín central. Después Eduardo Martín jugó sus cartas seguras y concretó un triunfo muy importante.

Ahora Ciego tendrá que pelear desde abajo y veremos cómo asimila la tarea. En cambio, sus rivales ganaron confianza y pueden volverse más contestones. No cambiaron todavía los pronósticos, pero sí las prioridades.

Todavía se comenta la demora del primer choque entre Pinar y La Habana, muy accidentado por la lluvia en San José. Varios lectores preguntan si hubo una violación de las reglas, pues ellos opinan que el partido debió suspenderse por la tarde, cuando ganaba Pinar 3-0 a la altura del séptimo episodio.

Es una cuestión de interpretación, como se señalaba en la transmisión televisiva. En el reglamento de la serie hay un acápite que dice lo siguiente: «El representante de la Comisión Nacional de Béisbol (comisario técnico) y el árbitro jefe de grupo, serán los encargados de decidir si son o no apropiadas las condiciones del terreno para comenzar o reanudar un juego, o agotarse todas las posibilidades para terminar el mismo».

Esto último fue lo que se hizo, aunque sembró un precedente y de ahora en adelante costará mucho trabajo suspender un desafío. Seguramente pesó mucho el hecho de que estamos en un play off.

También nos preguntan cuáles han sido los juegos más largos en series nacionales. Pues bien, aunque la urgencia del diario no permite revisar a fondo los archivos inmediatamente, hallamos algunos datos entre los papeles de nuestro estadístico Benigno Daquinta.

El juego más extenso en un play off se disputó el 28 de abril del año 2006, cuando Santiago de Cuba demoró 17 capítulos para vencer 5-2 a Ciego de Ávila en el estadio José Ramón Cerero. Luego, el 27 de marzo de 2008, La Habana y Sancti Spíritus igualaron la marca en San José de las Lajas. Entonces también ganó el equipo visitante, dos carreras por una.

Ahora bien, el partido más extenso de nuestras series nacionales se celebró el 9 de diciembre de 1993. Aquel día Matanzas superó 10-6 a La Habana en 24 entradas.

No obstante, se recuerda un choque entre Villa Clara y Ciego de Ávila, también en el estadio Cepero, que terminó empatado a tres carreras en 27 innings. Este desafío tuvo lugar durante una Copa de las provincias centrales, evento que se celebraba tradicionalmente antes de comenzar las series nacionales, a finales de los años 80.

Mientras, en las llamadas Ligas Mayores de Estados Unidos, el juego más largo se efectuó el 1ro. de mayo de 1920, en el Braves Field de Boston. Entonces los locales y los Dodgers de Brooklyn terminaron empatados a una carrera en 26 entradas. Como dato curioso, los lanzadores Leon Cadore (Dodgers) y Joe Oeschger (Bravos) lanzaron todo el tiempo.