Confeccionar un equipo Todos Estrellas de béisbol en Cuba es buscarle las cuatro patas al gato. Tanto, que los Van Van de Juan Formell se atrevieron en una canción y algunas actividades terminaron como la fiesta del Guatao.
Así, de vez en cuando a los periodistas nos toca también bailar con la más fea. Pero de los tragos amargos se sale rápido y hoy les traemos ya nuestro escalafón del campeonato recién concluido. De paso, agradezco la colaboración inestimable del estadístico Benigno Daquinta, cuyos datos causan más asombro que un elefante bailando suiza.
Comencemos por la ofensiva, para no salirnos del menú tradicional. En la receptoría nuestro voto es para el santiaguero Rolando Meriño, quien fue el primero en el coeficiente de rendimiento integral (JAS), con .349 de average en 85 juegos, 112 hits, 24 jonrones, 21 dobles y 84 carreras impulsadas. Su mayor rival fue el pinareño Yosvani Peraza, pero los números del gordo son ligeramente inferiores: 84 sencillos, 16 dobles, 23 vuelacercas, 68 compañeros remolcados y .329 de promedio en 77 partidos.
Como inicialista escogimos al avileño Yorelvis Charles, segundo en el JAS con .387 de average, 115 hits, 14 jonrones, 15 dobles y 65 impulsadas. En cambio, el tunero Joan Carlos Pedroso lo superó en el JAS (508 por 467), aunque tuvo un promedio inferior (.347), pegó menos cañonazos (92) y dobles (13). Su fuerte fueron los jonrones (26) y las impulsadas (75).
La segunda base deparó algo similar, pero aquí nos inclinamos por el santiaguero Héctor Olivera, puntero en el JAS (478). Su promedio fue de .346 (115 sencillos, 23 dobles, cinco triples, 16 bambinazos), con 71 impulsadas y 84 anotadas. Por su parte, el guantanamero Yoilan Cerce fue líder en hits (136) y bateó .375, con 24 dobles, dos triples, 14 jonrones y 50 impulsadas.
En el campo corto elegimos al tunero Alexander Guerrero, quien le sacó el forro a la pelota: 338 de average, con 95 hits, 24 dobles, dos triples, 19 jonrones y 71 impulsadas. El matancero Yadil Mujica tuvo el promedio más alto (.358), pero pegó solo 15 extrabases (12 dobles y tres jonrones) e impulsó a 39. Igualmente, tuvieron un gran año el villaclareño Aledmis Díaz (.341), el metropolitano Roberto Carlos Ramírez (.340) y el avileño Yorbis Borroto (.318).
Para cerrar el cuadro situamos a Yulieski Gourriel en la esquina caliente, apuntalado por un JAS superior al de Michel Enríquez (548 por 499). El joven espirituano promedió .399, con 131 hits, 22 dobles, siete triples, 22 jonrones, 90 impulsadas y 77 anotadas. A su vez, el pinero se empinó en average (.401) y dobles (37), pero estuvo por debajo en lo demás: un triple, 12 jonrones, 66 impulsadas y 68 anotadas.
El jardín izquierdo tiene un solo nombre, Alfredo Despaigne (.375 y el récord de 32 para la calle), mientras en el central Giorvis Duvergel (.386) también les saca un trecho a los demás. Finalmente, el holguinero Yeral Sánchez (.352) tampoco tiene mucha discusión en la pradera derecha.
Entre los designados nombramos al holguinero Lerys Aguilera, con average de .328 y otras credenciales de más peso: 117 hits, 23 dobles, 23 jonrones y 81 impulsadas. El matancero Yohandry Garlobo (.364) y el avileño Isaac Martínez (.352) tuvieron mayor promedio, pero solo eso.
Por último, en la colina seleccionamos al derecho pinareño Yunieski Maya, al zurdo avileño Maikel Folch, y al cerrador del mismo equipo Vladimir García, recordista en juegos salvados. Como novato del año escogimos a Wilfredo Aroche, de Metropolitanos, quien bateó .305 con 75 hits, 17 dobles, cinco triples, cuatro jonrones y 40 impulsadas. El zurdo pinareño Raudel Lazo estuvo bien, pero lanzó poco y eso lo limitó.
Guantes de oroMientras esperamos porque se instituya oficialmente un premio para los mejores defensores, veamos nuestro Todos Estrellas en este importante aspecto.
Detrás del plato vuelve a morder calladito el matancero Yaismel Alberro, con dos errores en 80 choques y un altísimo promedio de .995. Cometió un solo pass ball, le robaron 25 bases y capturó a otros tantos. Eriel Sánchez jugó 84 partidos, pero alternó como designado y en primera base, mientras Ariel Pestano actuó apenas en 58 desafíos. Ambos tuvieron menor average que el yumurino.
En la inicial no hay dudas: el mejor fue el pinero Luis Felipe Rivera, con dos errores en 87 juegos (763.2 inning y 908 lances). La segunda base es del avileño Mayito Vega, quien pifió seis veces en 77 desafíos, para un average de .985. En este último aspecto lo superó el villaclareño Andy Sarduy (987), pero jugó menos choques (64) y no siempre en la intermedia.
El guantanamero Giorvis Duvergel fue el más ofensivo de los jardineros centrales. Foto: Alex Castro Ningún tercera base tuvo un año brillante a la defensa, pero el mejor fue Yulieski Gourriel, quien cometió cinco errores en 153 lances en esa posición (también jugó segunda). Lo mismo sucedió en el campo corto, donde Yorbis Borroto le sacó un punto en average a Roberto Carlos Ramírez (971 por 970). El avileño falló 14 veces en 86 desafíos, en tanto el capitalino tuvo una pifia más, aunque en los 90 juegos de su equipo.
Un paréntesis: además de Roberto Carlos, solo otros cinco atletas jugaron la temporada completa. Se trata de sus compañeros en Metropolitanos Irait Chirino y Doelsis Linares, junto al sensacional Alfredo Despaigne, Lerys Aguilera y el tunero Andrés Quiala.
Pasemos entonces a los jardines. Aquí no tuvo rivales en la pradera izquierda el habanero Rafael Orta, quien registró un solitario error en 88 choques. Lo mismo le sirve a su comprovinciano Juan Carlos Linares en el centro del diamante, con una mancha en 68 partidos. Y en el derecho brilló el santiaguero
Alexei Bell, también con una marfilada en 74 programas. Hasta aquí las clases, pues mañana entraremos de lleno en los play off. Háganos saber sus puntos de vista, pero dudo que nos pongamos de acuerdo, salvo en lo más evidente. Como siempre, bienvenida la polémica.