Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

El campeón nacional Yuniesky Quesada salió de un volcán y hoy puede estar en otro. Foto: FIDE Con tres empates y una espectacular victoria del campeón nacional Yuniesky Quesada (2580), el equipo masculino cubano le ganó el pulso a Uzbekistán en la segunda ronda de la Olimpiada Mundial de ajedrez. Mientras, las muchachas cayeron por la mínima ante Serbia.

Ya habíamos dicho que los uzbecos no serían presa fácil y la realidad se encargó de confirmarlo. El match se puso al rojo vivo después de sendas tablas en los tableros uno, dos y cuatro, quedando el tercero para definir. Pero Yuniesky no defraudó y consiguió el punto de oro.

Sin embargo, si no hay cambios en el «orden al bate» —dicen algunos managers beisboleros que las alineaciones ganadoras no se alteran— el villaclareño quizá tenga hoy el mayor reto de su carrera. Sucede que nuestros próximos rivales serán los rusos y hasta el momento ellos han sentado en la tercera mesa al mismísimo Alexander Morozevich (2787), segundo del ranking mundial.

Este viernes, Rusia superó estrechamente a Polonia, con éxito del suplente Dmitry Jakowenko (2737) —refrescaron a Svidler (2727)— y tablas de Kramnik (2772), Grischuk (2719) y Morozevich. Con el mismo marcador Ucrania dominó a Serbia. Los disparos de Vassily Ivanchuk (2786) y Pavel Eljanov (2720) tumbaron a los balcánicos.

En tanto, Armenia —actual campeón— y Azerbaiján volvieron a lucir casi perfectos, arrollando esta vez 3-1 a Moldavia y Eslovaquia, respectivamente. Otros fuertes como Alemania 1, China, India, Hungría, Francia y Bulgaria salieron airosos de la misma manera. Sorpresa fue la paridad entre Grecia y Estados Unidos.

La jornada fue pródiga para Latinoamérica, pues vencieron Brasil, El Salvador, Colombia, Paraguay, Ecuador y Costa Rica. Perdió Venezuela y empató México. También triunfaron España y Portugal.

Oleiny Linares (2262) sacó el mejor resultado del equipo femenino cubano en el duelo contra las serbias. La santiaguera se impuso con piezas blancas en el cuarto tablero y lleva dos victorias en su debut olímpico.

También aportó Lisandra Ordaz (2306), con nuevas tablas en el exigente segundo asiento. Sin embargo, cayeron las experimentadas Maritza Arribas (2303) y Sulennis Piña (2286). Pero las criollas se medirán hoy con las bolivianas y deben recuperarse.

Aquí los principales candidatos, Rusia y China, vencieron 3-1 a Eslovenia y Eslovaquia, por ese orden. Ojo con la niña prodigio china de 14 años, Yifan Hou (2578), quien lleva dos batazos a las gradas desde la primera mesa.

Las ucranianas, monarcas defensoras, se recuperaron con paliza sobre Irán (3,5-0,5) y la India contuvo 3-1 a Letonia.

Por nuestro continente, las argentinas cedieron ajustadamente ante las alemanas, en tanto venezolanas y salvadoreñas le aplicaron la escoba a Egipto y Qatar, respectivamente.

(Masculino) GM Leinier Domínguez (2719) vs. GM Rustam Kasimdzhanov (2672), tablas; GM Saidali Iuldachev (2511) vs. GM Lázaro Bruzón (2623), tablas; GM Yuniesky Quesada (2580) vs. GM Alexei Barsov (2513), 1-0; GM Shukhrat Safin (2510) vs. GM Holden Hernández (2580), tablas.

(Femenino) MI Alisa Maric (2405) vs. GM Maritza Arribas (2303), 1-0; MI Lisandra Ordaz (2306) vs. MI Natasha Bojkovic (2420), tablas; GM Andjelija Stojanovic (2357) vs. GM Sulennis Piña (2286), 1-0; MI Oleiny Linares (2262) vs. GM Irina Chelushkina (2360), 1-0.

A continuación les traigo algunos apuntes del periodista español Leontxo García, quien una vez fue entrevistado en nuestras páginas por el profe Jesús González Bayolo.

Leontxo escribe para la web chessbase, especializada en ajedrez, y cuenta historias curiosas que nos perdemos nosotros por no estar en Dresde, la sede del evento. Allá va eso:

«Como los grandes aún no se enfrentan entre sí, aprovecho para contar anécdotas interesantes de la “Olimpiada humana”, la que se juega lejos del escenario donde se lucha a muerte por las medallas. Por ejemplo, ¿a que nunca han visto un bebé durmiendo en su cochecito en la sala de juego durante las partidas? Pues aquí había hoy uno, hijo de la nigeriana Tolulope, quien tuvo que sacarlo corriendo a media partida, cuando el nene ha dicho que ya estaba harto de ajedrez y se ha puesto a llorar con la potencia de un tambor africano. No sé con quién lo habrá dejado la nigeriana, que encima ha perdido ante la macaense Lee Wing...

Seguro que usted puede dormir hoy a pierna suelta aunque no sepa por qué Andorra no presenta equipo femenino. Sin embargo, la explicación que me han dado los andorranos es muy interesante: “Hasta los 12 años, tenemos muchas niñas en las clases de ajedrez, pero al llegar a esa edad no queda ni una”. Ese testimonio coincide exactamente con muchos otros que he escuchado de profesores de ajedrez que no se conocen entre sí, de diferentes lugares de España, y alimenta la gran duda de si la inferioridad de las mujeres en el ajedrez se debe a una cuestión genética (está demostrado que los cerebros de hombres y mujeres son distintos, mejores para algunas cosas y peores para otras) o educativa (véase el ejemplo de las hermanas Polgar)».

Sobre esto último yo no coincido para nada —la profe Isabel Moya me mataría si digo lo contrario— y considero más racional el criterio de la rusa Alexandra Kosteniuk (2525), actual campeona mundial.

«Las mujeres somos físicamente más débiles. Las partidas de ajedrez clásico tienden a ser muy largas —cuatro o cinco horas—, y cada torneo dura semanas. Si cometes un error, pierdes concentración, y la resistencia física te ayuda a superar esto. Por tanto, si tienes menos resistencia, cometes más errores. Las diferencias entre hombres y mujeres en ajedrez se están acortando, pero sobre todo en las modalidades más rápidas (entre cinco y 25 minutos). Es decir, precisamente en aquellas donde la concentración no es tan importante como en el ajedrez clásico», dijo Kosteniuk en una reciente entrevista. Los dejo pensando.