La joven antillana rompió dos veces la marca absoluta en la prueba de persecución individual, a una distancia de 2000 metros, y se llevó el título. Además venció en la carrera por puntos
¡Qué cosas tiene la vida! Hasta el otro día, Marlies Mejías jugaba con muñecas y ahora se enfrenta con éxito a la dura vida deportiva. «Zuca», como la conocen muchos dentro del Velódromo Nacional Reinaldo Paseiro, nació hace 15 años en la localidad habanera de Güira de Melena y fue por embullo que se acercó al ciclismo.
«Comencé hace dos años, cuando una amiga de mi mamá la convenció para que me apuntara. Antes de eso casi no sabía ni montar bicicleta», confiesa entre risas.
«Luego ingresé en la Escuela de Iniciación Deportiva y alcancé dos medallas de oro en los Juegos Escolares del pasado año. Entonces me invitaron a entrenar en el velódromo nacional», explica.
—¿Te dedicarás por completo al deporte o tienes planes de estudiar otra carrera?
—De momento me fascina el ciclismo —responde y hace una seña a Ernesto Valdés, quien vela actualmente por sus pedalazos—, pero me encantaría estudiar Criminalística o Psicología.
—¿Y fuera de la pista qué prefieres hacer?
—Ver televisión. Puedo pasarme en eso un día completo sin cansarme.
—Dentro de poco vendrán los Juegos Olímpicos de Beijing y Cuba tiene grandes aspiraciones en el ciclismo. ¿Estás al tanto?
—Por supuesto. Deseo que mis compañeros mayores tengan mucha suerte y traigan las medallas que estamos esperando. Ojalá yo pueda asistir a las próximas Olimpiadas, o a los Juegos de la Juventud, en 2010. Ese es mi sueño. Si voy —y gano— le mandaría la medalla a Fidel.
En estos 44 Juegos Escolares Nacionales, Marlies rompió dos veces la marca absoluta en la prueba de persecución individual, a una distancia de 2000 metros, y se llevó el título. Primero, cronometró 2:48.266 minutos en la etapa clasificatoria y luego se superó a sí misma con 2:47.884.
Además, venció en la carrera por puntos y quedó segunda en las pruebas de habilidad y destreza.
«Sabía que podía romper el récord. Antes de los juegos había estado por los 2:49 minutos, un indicador que me daba esperanzas. Mi entrenador me dio mucho ánimo y me ayudó la buena preparación física», confesó.
Para rematar, la muchacha sumó este sábado su tercer cetro, al ganar la contrarreloj individual en la Autopista Habana-Melena. Recorrió los 7,5 kilómetros del trazado en 11:39 minutos, y así aventajó a la granmense Arlenis Sierra (12:01) y a la capitalina Liudmila Oliva (12:12), respectivamente.
Este domingo concluye el ciclismo con la ruta individual en ambos sexos, en un circuito de siete kilómetros por calles del reparto Alamar. Las muchachas darán ocho vueltas y los varones 14.