Foto: FIVB Excepto para Italia y Japón, que terminan una semana después, la fase clasificatoria de la actual edición de la Liga Mundial de voleibol concluye el próximo fin de semana.
Los intocables Brasil y Polonia, así como Rusia y Bulgaria, tendrán tiempo suficiente para ajustar sus estrategias con vistas a la finalísima, que se pondrá en marcha el día 11 de julio en Katowice, Polonia.
No ocurrirá igual en la llave B, en la que Estados Unidos, a pesar de mantenerse al frente todo el tiempo, no tiene aún el boleto asegurado para continuar viaje. Los estadounidenses acumulan ocho victorias y dos derrotas, con 928 puntos anotados y 855 permitidos, para un average de 1.085.
Pero Francia, que va segundo con 6-4 (963-926, 1.040), tendrá como último rival al sotanero Japón, ganador de un solo partido en diez intentos. E Italia, tercero en la disputa con 3-5 (747-774, 0.965) será precisamente el oponente de los líderes, y tiene pendiente un programa con los nipones.
En cambio, para los que tienen que emprender su regreso al hogar, viene la hora del análisis, la búsqueda y solución de los problemas afrontados en el camino competitivo.
Así, para el colectivo técnico de los cubanos el tiempo es oro. En un par de semanas hay que tener listos a los muchachos para su principal compromiso del año: los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro, Brasil.
Todo no se puede lograr de un día para otro, pero sigo con la idea de que es más sencillo seguir desarrollando a Oreol Camejo como distribuidor del balón, que limar en poco tiempo los defectos en la receptoría para su nueva función de atacador auxiliar.
En el Campeonato Mundial Juvenil celebrado en la India, hace dos años, Oreol finalizó como el segundo mejor pasador con un excelente average por set de 9.24.
¿Es que estamos tan escasos de auxiliares? Dos pasadores con potencialidades similares emulan constantemente entre sí, se obligan al máximo.
Al final de los encuentros con Rusia, el titular Yoandri Díaz fue al banco y lo sustituyó el prometedor bisoño Raydel Hierrezuelo (20 años), quien requiere de más tiempo para empeños de tanta envergadura.
Estoy convencido de que Hierrezuelo hubiese sido más útil (¡de vital importancia!), como pasador principal del equipo Cuba que, del 7 al 15 de julio, defenderá los colores patrios en el Campeonato Mundial Juvenil, con sede en Casablanca, Marruecos.
En mi modesta opinión, una misma situación ha conllevado dos significativas dificultades.