El estonio Margus Hunt implantó un récord mundial juvenil en la fase clasificatoria. ¿Lo habrá gastado todo o se superará a sí mismo hoy en la final? El discóbolo estonio Margus Hunt, primer recordista universal del XI Campeonato Mundial de Atletismo que tiene lugar en el estadio Chaoyang, al este de Beijing, China, protagonizó este martes un hecho inaudito en la historia de los deportes de tiempos y marcas.
Con sus 100 kilogramos de peso y 2,03 metros de estatura, Margus fijó en 66,45 metros el récord mundial para la categoría, pocos segundos después de convertirse en el primer competidor que ponía en marcha la jornada eliminatoria inicial del certamen ecuménico.
Nacido el 14 de julio de 1987, el también martillista y balista dejó atrás la marca de 65,18 metros que poseía el discóbolo egipcio Omar El-Ghazaly, desde 2003.
Hace un par de años Hunt finalizó sexto durante el Mundial en Grosseto, Italia, pero su actual progresión lo situaba de favorito: «Esperaba conseguir el récord del mundo en la final, pero jamás en mi primer intento. Soy feliz y pienso que puedo mejorarlo», confesó.
En el propio grupo A, el cubano Jorge Fernández marcó 58,42 metros en su primer intento y estará en la final de hoy con el séptimo mejor registro.
Mientras, Andy González, el otro criollo que tuvo acción en la primera jornada, pasó a la siguiente fase en los 800 metros.
Andy, monarca centrocaribeño con tiempo de 1:46.26 minutos, ahora fue segundo con 1:49.22 en su heat dominado por el ugandés Jimmy Adar (1:49.22). El mejor tiempo de las eliminatorias fue para otro ugandés, Abraham Chepkirwok, con 1:45.97.
Y Melisa Boekelman, fornida balista holandesa, se convirtió en la primera titular al dominar la prueba con 17,66 metros y relegar a la alemana Dense Hinrichs (17,35).
Entretanto, China envió un serio mensaje cuando en la otra final del día Xue Fei ganó inesperadamente los 5 000 metros (f) con mejor marca personal de 15:31.61 minutos.
TATYANA LISENKO, RÉCORD MUNDIAL EN MARTILLOLa rusa Tatyana Lisenko disparó en Tallin, Estonia, un martillazo de 77,80 metros para mejorar el récord mundial de la modalidad.
Con solo 22 años de edad, Lisenko alcanzó la proeza durante el quinto envío. El anterior tope universal era 77,41 y lo había establecido ella misma el 24 de junio de este año.