Foto: Juan Moreno, enviado especial CARTAGENA DE INDIAS, Colombia.— En el Parque de los Libertadores de América, situado en la avenida Santander, al norte de esta bella ciudad, hubo en la mañana del miércoles un ajetreo singular: una representación de la delegación cubana presente en los XX Juegos Centroamericanos y del Caribe se reunía para celebrar el 26 de julio.
Era un escenario propicio, pues en el área se levantan efigies de nuestro Héroe Nacional José Martí; del luchador haitiano Alexandre Petion; de José Bonifacio de Andrada e Silva, padre de la independencia de Brasil; del humanista venezolano Andrés Bello; de José Antonio Galán, patriota colombiano; del Benemérito de las Américas Benito Juárez; del general Francisco de Miranda; y del prócer argentino Juan Bautista Alberdi.
El acto se inició cuando el primer medallista olímpico del deporte revolucionario, Enrique Figuerola, y el luchador Odelis Herrero, reciente campeón de estos Juegos, depositaron una ofrenda floral ante la estatua de Martí. Luego, las niñas Emily Luna y Yumeris Peña, del grupo Patrimonito, se subieron a la tribuna para declamar versos de nuestro apóstol.
En las palabras centrales, José Ramón Fernández, presidente del Comité Olímpico Cubano, rememoró la gesta del 26 de julio y la tradición de lucha de nuestro pueblo. «La Revolución es hoy más fuerte que en aquellos días del Moncada, del Granma, de la Sierra Maestra. Desde aquí podemos proclamar ahora que seguiremos siendo fieles a los héroes y mártires», dijo el también vicepresidente del Consejo de Ministros.
Fernández se refirió igualmente a que los atletas cubanos saben que representan a un país heroico, y por eso les importa más la dignidad que las medallas de oro. «Es que el honor vale más que la vida, y la vida sin honor no tiene sentido», recordó.
Finalmente, agradeció al pueblo colombiano su solidaridad, camaradería, respeto y amistad con nuestra delegación en estos Juegos.
En la velada también estuvieron presentes Christian Jiménez, titular del INDER; el alcalde mayor de Cartagena, Nicolás Francisco Curi; Ramón Ignacio Arnau, ministro consejero de la embajada de Cuba en Colombia; y miembros de grupos de solidaridad con nuestra Patria.
Como epílogo, los lugareños que llegaron hasta el recinto intercambiaron saludos y afectos con algunas glorias del deporte cubano. Entre otros, Armando Capiró, Félix Isasi, Agustín Marquetti, Omar Linares, Enrique Figuerola, Tomás Herrera y Mercedes «Mamita» Pérez tuvieron que firmar un mar de autógrafos.
Antes de partir, los gritos de ¡Viva Cuba!, ¡Viva Fidel!, y ¡Hasta la victoria siempre!, rompieron el silencio cómplice de la mañana.