El tratamiento psicológico o psiquiátrico para pacientes con tendencias suicidas a veces se le puede tornar difícil a los médicos. Pero en Corea del Sur, un grupo de galenos creó un procedimiento un tanto extremo para estos enfermos. Resulta que a quienes llegan a consulta con trastornos o pensamientos de este tipo, los meten en ataúdes. Aparentemente, la «falsa experiencia de muerte» ayuda a los participantes a apreciar la vida luego de confrontar una versión simulada de sus últimos momentos. Para el tratamiento, los enfermos visten batas blancas, y se sientan dentro de los ataúdes ordenados en filas mientras escuchan una breve charla del doctor. Hasta ahora está dando resultado, dicen los médicos.