Pues sí, así mismo es. Resulta que un inglés experto en ganado ha contratado a un humorista para que le cuente ¡chistes a las vacas! Según dice el experto, mientras el chistoso hace sus cuentos, estudia la reacción de los rumiantes, porque —dijo— cuando esos animalitos están felices producen más. Sin embargo aclara que, en el primer espectáculo, si bien una parte se quedó a mirar al comediante hubo algunos abucheos y otras, las menos, no tuvieron interés y se retiraron. Lo que no explica es el tipo de chistecitos que hace el artista, porque si son del clásico Pepito…, ahí sí que no hay vaca que se resista.