Un pájaro australiano alcanzó más del 40 por ciento de su peso normal y no puede volar. El kookaburra comenzó a tener problemas con su peso cuando los residentes de un parque de Sidney comenzaron a alimentarlo con salchichas.
A punto de ser devorado por los perros fue trasladado al zoológico, donde el veterinario determinó dieta y ejercicios.
Una casa temporal equipada como un gimnasio para aves y un entrenador personal durante tres sesiones al día lo ayudará a ganar la batalla contra su panza. ¡A sudar para volar! No hay opción.