Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Por tercera vez triunfa el Horizonte Italia-Cuba

La tercera edición del festival del cine italiano en Cuba, ocurre del 19 al 23 de junio, en el cine 23 y 12, de la Cinemateca, con propuestas que abarcan joyas clásicas del cine italiano hasta algunas de las piezas más destacadas y recientes de una cinematografía que alguna vez fuera una de las más populares en Cuba

Autor:

Joel del Río

La tercera edición del festival del cine italiano en Cuba, ocurre del 19 al 23 de junio, en el cine 23 y 12, de la Cinemateca, con propuestas que abarcan joyas clásicas del cine italiano hasta algunas de las piezas más destacadas y recientes de una cinematografía que alguna vez fuera una de las más populares en Cuba, pero que en la actualidad, por desgracia, la exhibición de cada uno de sus títulos es casi rara avis.

Por supuesto que las películas italianas de hoy se parecen poco a las de los años 60 y 70, pero si intentamos trazar un futuro mejor, italianos y cubanos, necesitamos reconstruir en la memoria lo mejor del pasado, y este es uno de los objetivos del proyecto Orizzonti Italia-Cuba, concentrado en promover un diálogo intercultural entre nuestros países y crear «un puente entre ambas industrias cinematográficas».

Este año el Orizzonti, por nombrarlo coloquialmente, ocurre en el contexto del centenario de Marcelo Mastroianni (1924-1996), la proximidad del cumpleaños 90 de Sophia Loren, y el medio siglo de la muerte de De Sica (1901-1974).

Tales motivos justifican la presencia, en el segmento de los clásicos, de una serie de copias restauradas, que son proyectadas en alta definición, con la participación de algunas de las tres celebridades, e incluso se exhibe el filme muy poco visto en Cuba, Ayer, hoy y mañana (1963) que se resuelve en tres sketchs, donde De Sica dirige a Marcello y a la Loren que interpreta, por supuesto, a tres mujeres diferentes.

Los tres artistas volverían a trabajar juntos, para lucimiento memorable de cada uno, en la comedia sentimental Matrimonio a la italiana (1964) y en el melodrama histórico Los girasoles (1969) también presentes en el ciclo de la Cinemateca.

Como no solo de estrellas, y de los años sesenta, vive el Horizonte, también hay clásicos de muy diferentes estilos y propósitos, más cercanos en el tiempo, como Entrevista (1987), tal vez la última gran película dirigida por Federico Fellini, un juego complejo entre ficción y documental, pues el realizador de culto, uno de los más importantes del mundo, explica su forma de trabajar, mientras prepara la versión de un relato de Franz Kafka, en los estudios Cinecittá, donde concibió la mayor parte de sus grandes obras.

En el filme también participa Mastroianni, en tanto protagonista de varios filmes de Fellini como La dulce vida y Ocho y medio, y tampoco podía faltar en esta suerte de recorrido por la filmografìa fellinesca. Además, Mastroianni es protagonista absoluto de una suerte de entrevista confesional y memoriosa titulada Sí, ya me acuerdo realizada en 1996 y que recorre, a grandes saltos de recuerdos, los mejores momentos en la larguísima carrera de uno de los más completos y versátiles intérpretes del cine mundial.

Por otra parte, la apertura del segmento contemporáneo del ciclo italiano en Cinemateca corre a cargo del melodrama sofisticado que es Lo mejor de ti (2023), historia de amor que protagonizan los adoloridos personajes de Maria Grazia Cucinotta y Vincent Riotta, ambos dirigidos por Fabrizio Maria Cortese, quien también accedió a presentar su película para los espectadores cubanos y a ofrecer una clase magistral en la Escuela de Cine y TV, de San Antonio de los Baños. La segunda oportunidad se vale de los recursos de la comedia fantástica, en la vertiente de ofrecerle a sus personajes, los atribulados padres de dos gemelos de 18 años, la oportunidad de regresar al tiempo en que los hijos eran pequeños, y tal vez así los progenitories puedan empezar de nuevo, y tratar de vadear los mil errores que antes cometieron en la educación de los hijos.

También lidian con los conflictos, las sonrisas y lágrimas que hacen parte de la relación de pareja, o más bien del mundo interior de familias destrozadas, Felicidad y Mía que, así mismo, hablan de tensiones y tentaciones. La primera de las dos recuerda temáticamente los mejores filmes de Luchino Visconti (Rocco y sus hermanos, La caída de los dioses) en cuanto al análisis pormenorizado de una familia cuya estabilidad resulta minada por el carácter controlador y ególatra de los padres. El elemento desintegrador en Mía es un joven seductor que convierte en una pesadilla la vida de una quinceañera, miembro de una familia que había sido feliz.

Aunque forme parte del segmento contemporáneo de esta muestra, Me duele el cabello, dirigido por Roberta Torre, también ostenta un regusto nostálgico, en tanto presenta a una mujer, en la Italia contemporánea, que se obsesiona con parecerse a esa genial actriz que siempre será Mónica Vitti, y no solo logra parecérsele (en una muy notable interpretación de Alba Rohrwacher), sino que intenta reproducir en su vida situaciones de los personajes que la Vitti interpretara, solo que se trata de una de las más versátiles estrellas del cine europeo, capaz de encarnar, en piezas trágicas o comedias delirantes, mujeres de los más diversos talantes e inclinaciones.

Con este pretexto argumental, la realizadora se las ingenia para hablar, sutilmente, sobre el valor de la memoria y el pasado, en tanto componentes ineludibles en la conformación de la identidad personal e incluso de la idiosincrasia de una nación entera.

Quiso adoptar también un punto de vista esencialmente femenino, quizá debiera decir feminista, Misericordia, tercer largometraje de Emma Dante. La trama se desarrolla en un pequeño pueblo de pescadores de Sicilia, donde nace Arturo, el hijo de una prostituta que muere al dar a luz. Arturo es criado por las otras prostitutas, pero parece ser un ser extraño, sin miedo, en un micromundo poblado de mujeres marginadas, asediadas por la pobreza, la ignorancia y la discriminación.

Dentro de la tradicional importancia que ha tenido en Italia el cine de crítica social se ubica no solamente la película mencionada, sino también Palazzina LAF, dirigida y protagonizada por Michele Riondino e inspirada en una historia real ambientada en 1997, cuando los directivos de una empresa siderúrgica utilizan a un obrero como espía para que los informe sobre los elementos problemáticos de quienes habrá que deshacerse. Pero el tiro les sale por la culata.

En el Orizontti también figuran documentales y películas encaminadas a los géneros de ascendencia universal, y dirigidas al entretenimiento, como Diabolik, tercera parte de una trilogía de acción y aventuras inspirada en un personaje de historieta muy popular en Italia.

Respecto a los documentales hay dos títulos muy relevantes: ¿Puedo entrar?, una oda a la ciudad de Nápoles, a su cultura y su belleza, que también le da la palabra a quienes necesitan hablar de la parte fea, del caos o la delincuencia, y Semidei, un viaje por la historia de dos estatuas, creadas por artistas de la Grecia clásica, y rescatadas del fondo de mar en Riace, en 1972. Pero lo más extraordinario es que los dos guerreros de bronce se conservan intactos, a pesar del erosionante paso de los tiempos.

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.