El poeta cubano Delfín Prats fue laureado este viernes con el Premio Nacional de Literatura correspondiente al 2022. Autor: Daniela Fernanda García Gonzales Publicado: 13/02/2023 | 10:20 pm
ABIERTAS quedaron las constelaciones en mi mente cuando presencié este nuevo ascenso de Ícaro a centímetros de mí. Cuánta sencillez, humildad y a la vez esplendor desmedido se conjugan en un solo ser. No solo la genialidad de su estrofa, sino además la manera tan afectuosa y sincera de tratar a sus semejantes lo han colocado en el lugar cimero que ocupa en la literatura cubana.
En la tarde húmeda del viernes 10 de febrero y bajo la alegría que caracteriza a la fiesta del libro en la Isla, se homenajeó a Delfín Prats Pupo con el mayor lauro de las letras cubanas: el Premio Nacional de Literatura 2022.
Rodeado de amigos y amigas, entre fotos, congratulaciones y dedicatorias de libros, me le acerco.
Buenas Prats, soy periodista de Juventud Rebelde y me encantaría poder hacerle una entrevista —le dije, con aquel miedo que una novata de la profesión siente al lado de semejante figura excelsa para la nación. Sin embargo, su rostro se iluminó con una sonrisa. «¡Claro que sí! Yo amo ese diario, no lo leo todos los días, pero lo tengo presente siempre».
Aunque desde hace mucho tiempo ya para su pueblo ostentaba este más que merecido reconocimiento, el autor de Para festejar el ascenso de Ícaro, expuso que «constituyó una sorpresa mayúscula que cambió mi vida radicalmente. Después de pasados muchos momentos de ansiedad, con deseo de ser y no ser el Premio Nacional de Literatura; mientras soy sencillamente la persona que está haciendo poesía, la persona que está caminando, recorriendo mi amada ciudad de Holguín, me sorprendió muchísimo este gran premio».
Esta entrega sin duda alguna quedará en el imaginario popular como su misma poesía de delicadeza metafórica y refinada sensualidad lírica. Las redes estallaron en felicitaciones al autor de Lenguaje de mudos.
El también narrador y traductor holguinero, a pesar de ser calificado por muchos críticos como un poeta romántico por la manera de plasmar los sentimientos en sus versos, afirma que clasificar su poesía es muy difícil.
«Yo siempre rechazo el criterio estrecho que trata de circunscribirme en un poeta puramente amatorio; es decir, en un poeta que escribe únicamente motivado por un impulso amoroso. ¡No! Mis poemas parten efectivamente de la belleza del amor, pero esa belleza y ese amor van conjugándose en palabras, en versos, en estrofas, en el poema. Creo que mi poesía no es solo la lírica amatoria, no es solo los 20 poemas de amor puro que tengo, sino que abarca muchísimas temáticas que se alejan de este tópico.
«Sin llegar a la materia filosófica, ni metafísica, mis poemas también abordan aristas relacionadas con nuestra patria, con el pasado histórico, con los espacios de nuestras provincias, con la amplitud del paisaje que vemos y amamos».
La relación del Premio Maestro de Juventudes 2009, lauro que confiere la Asociación Hermanos Saíz, con las nuevas generaciones de escritores se basa en la ayuda, la confianza y asegura que el mayor consejo que puede brindar a los que se inician en la mágica aventura de la lírica es «que persistan en el camino y en la búsqueda interior porque la poesía conjuga la búsqueda interior con el mundo exterior donde está todo lo que amamos; las personas, las ciudades, el vivir cotidiano… El joven poeta debe insistir en la exploración de un camino interior que lo lleve finalmente al lugar donde van a abrirse las constelaciones».
De la influencia de Delfín Prats en los jóvenes se han escrito interesantes páginas, pero poco se habla del influjo que estos últimos han transportado a la vida del Premio David de Poesía 1968. «Este lauro se lo dedico precisamente a la juventud que ama, que trabaja, que vive. Lo dedico a la patria, al socialismo y al recuerdo de Fidel».
Su manera de hablar es pausada, pero honda en sentimientos. Las palabras que con dulzura y satisfacción expuso a los presentes en la sala Nicolás Guillén en la Fortaleza San Carlos de La Cabaña dejaron emocionados a muchos, pues como afirmara Cira Romero, miembro del jurado que por unanimidad seleccionó a Prats para ostentar el galardón, «se trata de un reconocimiento esperado a un hombre auténtico».
—¿Cómo califica la relación de Prats y la poesía en la actualidad: un período de descanso o un momento de preparación para futuras creaciones?
—Últimamente no he escrito ningún poema. Sin embargo, mis amigos han publicado una obra mía que se llama Islas Gilbert, un texto de vejez, en el que el poeta trata por todos los medios de aferrarse a ideas de juventud, de pasión, y se describe la efusión amorosa y los paisajes ardiendo. Mi relación con la poesía es secreta. A lo mejor esta madrugada escriba un poema, o pueden pasar dos años y no lo haga porque nunca trabajé la poesía metódicamente.
Su verso, espontáneo como el autor, va transitando delicadamente entre el esplendor y el caos, pero siempre apegado a la humanidad, a la realidad del hombre dentro de la sociedad y de la naturaleza.
Humanidad
Hay un lugar llamado humanidad
Un bosque húmedo después de la tormenta
Donde abandona el sol los ruidosos colores del combate
Una fuente un arroyo una mañana abierta desde el pueblo
Que va al campo montada en un borrico
Hay un amor distinto un rostro que nos mira de cerca
Pregunta por la época nueva de la siembra
E inventa una estación distinta para el canto
Una necesidad de hacer todas las cosas nuevamente
Hasta las más sencillas
Lavarse en las mañanas mecer al niño cuando llora
O clavetear la caja del abuelo
Sonreír cuando alguien nos pregunta
El porqué de la pobreza del verano y sin hablar
Marchar al bosque por leña para avivar el fuego
Hay un lugar sereno un recobrado y dulce lugar llamado Humanidad.
Delfín Prats.
Islas Gilbert es el más reciente poemario del escritor holguinero, publicado en formato de libro-arte el pasado 14 de diciembre en su cumpleaños 76. Foto: Tomada del sitio oficial de la Asociación Hermanos Saíz.