Fotograma del filme La bella del Alhambra. Autor: Fotograma de la película Publicado: 21/09/2017 | 06:34 pm
Desde abril pasado la distancia entre Cuba y Francia se ha hecho más corta. Pero no se alarme; no se trata de un estremecimiento de la Tierra ni de rutas misteriosamente emergidas para unir ambos países. La noticia es más modesta:
Se trata del programa Verano de Cuba en Francia, iniciativa que surgió luego de la visita oficial del Presidente cubano Raúl Castro Ruz al país galo, y que —como expresó en su inauguración la viceministra primera de Cultura, María Elena Salgado— propicia una nueva mirada al intercambio y la colaboración entre las dos naciones.
Con una agenda que contempla presentaciones teatrales, danzarias y de filmes cubanos, así como exposiciones de renombrados artistas de la plástica —entre ellos Alexis Leyva «Kcho», Diago y Figueroa—, la jornada se extenderá hasta septiembre próximo abarcando varias galerías y escenarios de la capital francesa.
De acuerdo con el viceministro cubano de Cultura, Fernando Rojas, la realización de este programa entraña un conocimiento más profundo entre los dos países: «El hecho de estar exponiendo nuestro arte en una de las grandes capitales europeas es, sin duda, significativo para la difusión de nuestro quehacer. Es una experiencia inédita, que crea una plataforma para repetirla en el futuro», dijo.
El funcionario añadió que del mismo modo en que el arte cubano gana espacio en suelo galo, sucede en la Isla con las manifestaciones de su cultura. Entre estas mencionó el Festival de Cine Francés, recién concluido, y subrayó el impacto de la enseñanza de su idioma a través de la Alianza Francesa, considerada la más grande del mundo por número de habitantes.
Asimismo, Rojas destacó el trabajo de la Embajada cubana en Francia para el desarrollo del programa y la buena voluntad de las instituciones de ambos países para llevar a cabo esta y otras iniciativas en aras del fortalecimiento de los vínculos bilaterales. Ello se ha hecho con escasos recursos y aunando voluntades de numerosas instituciones y organizaciones amigas, apuntó.
«Creo que en este país europeo empiezan también a descubrirnos un poquito más», expresó por su parte el historiador Eduardo Torres Cuevas, director de la Biblioteca Nacional José Martí. Existen los amigos franceses de siempre que nos conocen, nos vemos, pero hay otros espacios de Francia a los que hay que llegar. Esta es una manera de demostrar que en Cuba hay riqueza, talento y diversidad cultural».
Invitado al programa, el también presidente del Grupo Parlamentario Cuba-Francia enfatizó las múltiples perspectivas con que se presentan las relaciones entre los dos Estados y las puertas que se abren en este nuevo tiempo histórico.
Además de la impartición de conferencias y la firma de un acuerdo entre la Alianza Francesa de Cuba y la Universidad de Villete, su participación en la Jornada comprendió la presentación de Los tres Heredia, obra sobre tres de las personalidades más importantes en las relaciones entre los dos pueblos: José María Heredia, Severiano de Heredia y José María de Heredia.
Entre sus actividades, Verano de Cuba en Francia incluye asimismo la exhibición de los filmes La bella del Alhambra, Viva Cuba y Verde verde; junto a las presentaciones de la compañía Teatro-Danza de Santiago de Cuba, y de la artista Nerea Vega.
Según ha trascendido, hasta la fecha entre las propuestas nuestras las que mayor impacto han conseguido son: la exposición Todos los caminos, de Kcho, y el documental Todo Guantánamo es nuestro, sobre la ocupación ilegal de ese territorio por los norteamericanos. Más adelante se presentarán otras películas cubanas, conciertos y nuevas exposiciones.