LAS TUNAS.— El XI Coloquio Nacional de Eclecticismo y Tradición Popular sesiona en la Plaza de la Revolución Mayor General Vicente García González, de esta ciudad, y en sus debates son puestas a consideración algunas de las experiencias cubanas más notables referidas a la restauración de inmuebles y centros históricos.
El programa teórico del evento incluye, entre otros trabajos, investigaciones en torno a la correspondencia entre la arquitectura y las tradiciones populares, la disponibilidad de los materiales utilizados en los procesos de restauración, el estudio histórico de inmuebles y las soluciones alternativas para la conservación de monumentos y edificios.
El coloquio, además, deviene marco propicio para conferir los premios provinciales en las categorías de Conservación y Restauración, para los cuales están propuestos el Monumento a la Batalla de Palo Seco, que ostenta la condición de Monumento Nacional, y la Iglesia de Puerto Padre.
En el contexto del importante cónclave, además, se exponen los proyectos concebidos para la reanimación urbanística de las ciudades de Las Tunas y Puerto Padre, las mayores de la provincia, insertadas en un proyecto de desarrollo local a cargo de las autoridades gubernamentales municipales.
El Coloquio Nacional de Eclecticismo y Tradición Popular realiza sus convocatorias desde 1986 con la intención de propiciar investigaciones y de socializar resultados de proyectos constructivos dirigidos a proteger un estilo centenario de notoria presencia en el panorama cubano.
El eclecticismo —llamado «estilo sin estilo» por el insigne escritor cubano Alejo Carpentier— tiene una gran raigambre en la capital tunera, derivado, entre otras cosas, de las ruinas en que quedó la ciudad luego del incendio a que la sometieron nuestros mambises el 6 de octubre de 1897.