El licenciado en Historia de arte debe ser capaz de dar respuestas a exigencias culturales, artísticas y sociales en cualquiera de los ámbitos y estructuras donde la cultura sea uno de los componentes. Autor: Raúl Pupo Publicado: 21/09/2017 | 05:51 pm
El licenciado en Historia de arte debe ser capaz de dar respuestas a exigencias culturales, artísticas y sociales en cualquiera de los ámbitos y estructuras donde la cultura sea uno de los componentes; de ahí que los egresados de la carrera, apertrechados de una formación básica (de carácter estratégico), enriquecida con una preparación complementaria (de carácter más táctico), deben ser capaces de participar de una manera activa en la vida dinámica cultural donde se inserten, actuando asimismo en proyectos comunitarios y/o en equipos multidisciplinarios en áreas donde también intervienen la sociología, la antropología, el turismo, la ecología, el medioambiente, etc.
Este egresado universitario puede desempeñarse, indistintamente, como investigador, crítico, promotor y/o asesor de las artes visuales y audiovisuales. Asimismo, está capacitado para ejercer el trabajo técnico especializado en galerías y museos encargados de la conservación y difusión del patrimonio artístico, y para fungir como docente de nivel superior en el campo de la enseñanza artística y de otras carreras universitarias.
Se puede desempeñar, además, en las instituciones culturales —fundamentalmente aquellas especializadas en la investigación y promoción de la cultura artística—, las publicaciones especializadas, los medios de difusión masiva —sobre todo aquellos en los que se genera y circula la producción audiovisual—, y en la propia comunidad del territorio o el país donde se instrumenten proyectos de investigación y promoción artístico cultural.