Los cambios en la televisión nacional tienen como objetivo agradar a los distintos tipos de públicos. Autor: Kaloian Santos Cabrera Publicado: 21/09/2017 | 05:29 pm
Desde hoy, los domingos en televisión exhibirán una programación renovada. Los reajustes responden a la necesidad de satisfacer las demandas de los espectadores y mejorar la calidad de las opciones que han estado en pantalla en los últimos tiempos.
La importancia de estas modificaciones y la repercusión que tendrán en la conformación de las propuestas de los cinco canales para el resto de los días fueron algunas de las cuestiones que Fabio Fernández Kessel, director de Contenido y Programación de la Televisión, esclareció en conversación con Juventud Rebelde.
El domingo tiene sus particularidades, pues es el día en que la familia permanece en el hogar la mayor parte del tiempo, y la televisión se convierte en uno de los principales medios para socializar y recrearse.
Según comentó Fernández Kessel, «el análisis de los datos que posee la Televisión Cubana sobre los hábitos de vida de la población y consumo de los diferentes medios masivos de comunicación pone de manifiesto el potencial de audiencia que existe ese día».
Diversificar la programación, satisfacer las demandas y responder a los intereses de información y entretenimiento de públicos diversos —sin perder de vista cuestiones como la segmentación según sexo, nivel de instrucción, edad, referencias generacionales, entre otras— son elementos que hacen de esa labor renovadora un desafío cotidiano.
«La Televisión Cubana tiene la responsabilidad de proporcionar, en sus diferentes canales, una amplia gama de opciones que propicien que los televidentes puedan elegir la que prefieran. La programación que se propone para el domingo exigirá de los televidentes “una navegación” entre contenidos de mayor riqueza, entre opciones de similar atractivo para decidir qué ver; también demandará de una “negociación familiar” para establecer prioridades».
Entre los cambios principales que los espectadores podrán apreciar están la inclusión de 14 horas de programación variada en directo del Canal Multinacional TeleSur por el Canal Educativo 2, señal que también estrenará algunos espacios como Perfiles (dedicado a ofrecer información de la vida y obra de músicos cubanos) y El mundo del documental.
Por su parte, según se refiere en el portal de la televisión en Internet (http://www.tvcubana.icrt.cu), el Canal Educativo asume a partir de hoy la señal Tu TV Música, una experiencia que se retoma. Asimismo, se refuerza el perfil cultural y se reciben espacios de fuerte tradición como Palmas y Cañas, y Escriba y Lea.
Mientras Cubavisión traslada a su señal los programas De tarde en casa y Pasaje a lo desconocido, Tele Rebelde se ratifica como el canal de los deportes con espacios nuevos como Vale 3 —un acercamiento a lo mejor del baloncesto internacional.
En tanto, Multivisión ofrecerá los domingos una selección de materiales del séptimo arte que incluye filmes, programas de apreciación cinematográfica, mediometrajes infantiles, dibujos animados, entre otros.
«El éxito de esta “irrupción fílmica” depende de múltiples factores. Multivisión necesita disponer de un alto volumen de información sobre sus públicos, de cómo escalonar sus propuestas, cuándo ubicar los estrenos, del dominio de los horarios adecuados para ubicar determinados contenidos, de la definición de los espacios de retransmisión... A ello se suma el alto nivel profesional que se requiere de los especialistas encargados del proceso de selección de los materiales y de la infraestructura que garantiza el almacenaje ordenado de cientos de horas de programas. Para este canal, el reto de satisfacer a su público es elevado».
—¿Hasta qué punto los cambios implementados responden o reflejan realmente los intereses de los espectadores?
—Puedo asegurar que los reajustes responden realmente a intereses de grandes segmentos poblacionales, en particular los que privilegian para el domingo la programación cinematográfica, el deporte de alta calidad nacional e internacional, la música y las opciones informativas noticiosas y no noticiosas; sin dejar de tener en cuenta los contenidos dirigidos al público infantil.
«Todos estos reajustes se han apoyado en resultados de indagaciones del Centro de Investigaciones Sociales del Instituto y de otros centros afines, que han profundizado en el análisis del consumo cultural, las demandas juveniles y el funcionamiento de la familia cubana, entre otros temas».
—¿Qué repercusión tendrá para la programación nacional la inclusión de la señal de la multinacional TeleSur en vivo?
—La presencia de Telesur en vivo contribuirá al enriquecimiento de la programación general y constituirá un elemento capaz de dinamizar la creatividad de nuestros realizadores, en particular en el campo de la información periodística, noticiosa y no noticiosa.
—Existen muchas expectativas respecto a programas participativos que aún no se ven en la programación.
—Es cierto, las expectativas sobre estos programas son altas y la Televisión los considera entre sus principales prioridades. Están en proceso de análisis varios proyectos, a la par del desarrollo de sesiones de trabajo con grupos creativos. En todo ello juegan un papel clave las capacidades de producción, el carácter instructivo sobre el que deben erigirse los programas, la concreción de un real espectáculo televisivo, la posibilidad de propiciar un adecuado nivel de entretenimiento y la garantía de ofrecer premiaciones que se correspondan con el desempeño de los participantes.
—¿Cuáles son las proyecciones en este camino?
—Quisiera ofrecer una fecha aproximada para la puesta en pantalla de este género de programas. Eso depende de cuestiones muy sensibles, como concertar el esfuerzo y las decisiones de varias instituciones de concretar productos que demandan recursos de todo tipo.
«No obstante, me arriesgo a decir que en próximos meses podrían verse resultados en esta dirección de trabajo. Hablo en plural, pues la Televisión requiere de varios programas participativos, dirigidos a públicos diferentes; personalmente espero que los niños y los jóvenes se encuentren entre los primeros».
La transmisión directa de TeleSur durante más de una decena de horas al día, la existencia de un canal cinematográfico los domingos y la presencia de propuestas extranjeras arrojan una inquietud: ¿Cómo quedará el balance entre programación nacional y foránea?
Acerca de este asunto, el directivo de la Televisión argumentó que esa circunstancia determina el reforzamiento de la producción nacional de programas en vivo y grabados. El medio debe incrementar una producción que goce de la preferencia de los televidentes. Por esa razón, se deben potenciar aquellos espacios —algunos informativos, el policiaco cubano, los dramatizados seriados, dibujos animados, determinados programas musicales— que despiertan la atención y el reconocimiento público.
«En la producción de programas nacionales también es decisivo el apoyo y comprensión de muchas entidades y organismos del país. La producción demanda de insumos diversos en tiempos muy precisos, de cantidades atípicas de elementos para concretar diseños escenográficos, iluminación, maquillaje, vestuario, pintura...».
—¿Dónde radican las principales zonas de interés y de conflicto de los cambios realizados?
—Las principales zonas de interés pueden estar en ver si la Televisión es capaz de mantener una programación dominical con la calidad que se ha propuesto y en esperar un tiempo prudencial para la aparición en pantalla de buenos programas nacionales y la renovación de algunos existentes.
«Conflictos y resistencia siempre van a acompañar a los procesos de cambio, pero espero que estos siempre puedan ser superados porque la intención es mejorar la calidad de la programación en todo el sistema televisivo».
Agregó Fabio Fernández que en este punto no se puede olvidar la calidad de la señal. «Existen televidentes que afirman que en sus áreas de residencia no todos los canales se captan con similar calidad. Por tanto, desconocen la existencia de buenos programas. Este hecho, en algunos casos, responde a deficiencias en la calidad y montaje de las antenas receptoras. En otros está dado por dificultades reales de la señal que deben ser analizadas por las entidades competentes».
—¿Qué podrán esperar los televidentes?
—Las modificaciones realizadas deben satisfacer, en primer lugar, a determinados segmentos de televidentes los domingos. No tengo dudas de que el proceso de transformaciones que ahora solo comienza, debe tener una repercusión favorable en el público que aún no considera satisfechas sus expectativas.
«Considero que la voluntad de la Televisión de producir programas por paquetes —es decir velar por la vida útil y su permanencia en pantalla—, de realizar investigaciones cualitativas para la producción de espacios, la introducción de procedimientos para mejorar la evaluación de los programas, y el perfeccionamiento de las vías de retroalimentación con los públicos, pueden contribuir a elevar los niveles de satisfacción de los televidentes. El espectador cubano puede esperar una mejor televisión y un proceso de cambio que va en esa dirección».