La instalación de Segura es una de las obras que el público puede apreciar en la Oncena Bienal de la Habana. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:21 pm
El artista cubano Esterio Segura invita en la bienal habanera a un viaje imaginario en submarino, híbrido entre automóviles del pasado siglo con prototipos de esos buques navales, informó PL.
Los interesados en realizar la travesía solicitarán por encargo la confección digital de su propio vehículo y contarán con la asesoría de un grupo de especialistas, integrado por un artista de academia, un ingeniero naval y un mecánico con vocación de poeta.
La instalación de Segura, uno de los proyectos participativos de la fiesta de las artes visuales que se celebra hasta el 11 de junio próximo, se apoderó de la galería Villa Manuela en la barriada del Vedado para ubicar una oficina de astilleros con tres computadoras y un equipo multidisciplinario dispuesto a diseñar esos autos.
El destino de este Submarino hecho en casa será la isla gemela de Cuba, ubicada en las mismas coordenadas geográficas, con similar silueta pero virgen, despoblada de seres humanos.
En ella también habitan los mismos manatíes y cocodrilos, existen iguales ríos, llanos y montañas. Es un lugar para redescubrirnos nosotros, una autorreflexión sobre nosotros mismos, explicó Segura a Prensa Latina. Esta propuesta es toda una ficción pero ofrece una mirada optimista acerca de la emigración y la comunicación, destacó. La idea es que el público interactúe, participe, piense, resaltó.
¿Porqué buscar otro sitio para construir un edificio si el tuyo se está cayendo? preguntó. ¿Porque construir otro que tiene diferentes cimientos si puedes levantar el tuyo? cuestionó.
Para el artista, esta iniciativa sensibiliza a los seres humanos a edificar su propia historia, ser partícipe de ella.
Es además, una óptica diferente del fenómeno migratorio y su interpretación desde el arte. Soy de los que piensa, explicó, que el arte debe recuperar su propia identidad para el disfrute de todos, no como objeto decorativo, sino como un acto artístico.
Más de 60 maquetas de submarinos ya están elaboradas y otras 700 esperan por el ingenio del equipo de astilleros. La solicitud se realiza mediante firmas plasmadas en varios dibujos de esos buques colgados en las paredes de la galería, explicó el artista.