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Retorno de madurez

El ímpetu movilizador y compromiso del movimiento estudiantil universitario santiaguero estremeció la oriental urbe, como parte de las Asambleas Post 10mo. Congreso de la FEU

Autor:

Odalis Riquenes Cutiño

SANTIAGO DE CUBA.—El proceso orgánico del 10mo. Congreso que a dos años del centenario de la organización regresa a la brigada, con la conciencia de que su funcionamiento pleno y voluntario es la mejor forma de hacer las cosas bien desde la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), es expresión de la madurez alcanzada por el movimiento estudiantil universitario.

Así lo ratificó aquí Ricardo Rodríguez González, integrante del Consejo de Estado y presidente nacional de la FEU, al participar en las asambleas post 10mo. Congreso de la organización en la Universidad de Ciencias Médicas (UCM) y la Universidad de Oriente (UO), que del 20 al 22 de marzo estremecieron la ciudad heroica con el ímpetu movilizador y compromiso de la juventud vinculada a los centros de altos estudios.

Todo el dinamismo de los noveles universitarios dispuestos a ser protagónicos desde su organización en la transformación social, se hizo patente en el surco, en intervenciones comunitarias, desde el arte compartido ante una fogata, en intensos debates en comisiones y especialmente en las agudas sesiones plenarias en las que, en empeño de seguimiento, y ante la presencia de las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en la provincia, se pasó revista al cumplimiento de los acuerdos adoptados en los congresos de ambas instituciones.

En las dos reuniones se habló con valentía de los pendientes y se trazaron estrategias para fortalecer el funcionamiento de una organización, que con la entrega de sus miembros apuesta por la continuidad, más allá del eslogan.

Usando códigos muy de su tiempo como la analogía con un juego de pokemones, en la reunión de la UCM se definía que conseguir la movilización efectiva desde la brigada, como en la zaga asiática, entraña el desafío de conseguir la evolución de lo necesario, o lo que es lo mismo usar todas las herramientas de comunicación y revolucionar los modos de convocatoria en función de aportar los elementos que permitan al estudiantado identificarse con las tareas de la organización, y en consecuencia ser protagónicos en su día a día. Solo así lo obligatorio se convertirá en necesario, en lo prioritario que concite a participar, fue consenso.

Con igual profundidad los futuros galenos concordaron en que el trabajo político ideológico transversaliza la vida la organización y que únicamente llegando al hombre se consigue la responsabilidad individual con las estructuras FEU.

La importancia de fortalecer el trabajo en esa gran brigada que son las residencias estudiantiles, de encontrar el mejor camino para la atención a los planteamientos estudiantiles, aspecto crucial para la identificación de la membresía con sus dirigentes; de entender la autonomía de la organización como espacio para compulsar a todos los factores que convergen en las universidades y de contar con líderes capaces de convencer y esgrimirse en paradigmas, fueron aristas que igualmente alimentaron reflexiones en la UCM.

Con la empatía y el sentido humano en que han sido formados hablaron los futuros galenos sobre la proyección social de la organización, de la atención a los estudiantes en situación de vulnerabilidad, el empleo estudiantil y la realización de tareas de impacto en barrios y comunidades, y coincidieron en que unidos, desde la brigada, es posible crear redes de apoyo para que ningún estudiante se sienta estigmatizado por la etiqueta de vulnerable y se abogó porque los diferentes proyectos que se encaminan en las facultades lleguen también a alumnos, profesores y sus familias de presentar alguna situación de vulnerabilidad.

Plenos del #OrgulloUO y el entusiasmo que les caracteriza, los más de cien delegados a la Asamblea de la mambisa Universidad de Oriente, demostraron que el accionar de una FEU protagónica y transformadora desde su célula fundamental, se concreta desde los pequeños detalles del día a día.

Consecuentes con esa idea, dieron trascendencia a asuntos como elevar la participación en las guardias estudiantiles, una manera de responder a una necesidad del Alma Máter en el cuidado de los recursos que son de todos; reavivar la emulación en brigadas y residencias, fortalecer el movimiento de aficionados al arte y poner todas sus potencialidades como centro formador de comunicadores en función del trabajo de la FEU y recuperar espacios como la revista El Mambí y la radio base universitaria.

La necesidad de motivar la investigación estudiantil desde la brigada y de que el quehacer de los 114 grupos científicos estudiantiles creados ponga el conocimiento que se genera desde el pregrado en función de transformar problemáticas sociales del territorio, fue enfoque reiterado que habla de los deseos de los noveles de un centro formador de excelencia de contribuir a la construcción colectiva de la nación.

En el intercambio, franco y fundamentado, se habló de poner la ciencia universitaria también en función de la formación de los líderes que marquen el paso de la continuidad; se abogó por hacer un mayor uso de las ferias de empleo como oportunidad para favorecer la inserción laboral de los universitarios, en puestos que además de cubrir necesidades de los distintos sectores, propicien la necesaria remuneración y tributen a su formación profesional.

Propiciar el ingreso efectivo de los estudiantes del Curso Por Encuentros a la vida de la FEU y crear mecanismos para que en mayor cuantía los técnicos de nivel medio con una trayectoria relevante en la enseñanza Politécnica puedan ingresar a las universidades, fueron tópicos que marcaron los análisis en la reunión de la UO, en la que al igual que en la Universidad Médica fueron reconocidos los estudiantes, profesores y dirigentes que sobresalen en el día a día de la FEU santiaguera.

Con el cariño de la madre que siempre les acompaña, la primera secretaria del Partido en Santiago de Cuba, les ratificó la confianza de la máxima dirección partidista y gubernamental santiaguera y su convicción de que en la inteligencia y disposición de la juventud universitaria, está asegurada la continuidad.

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