21
Asambleas municipales del 12mo. Congreso de la UJC. Autor: LAZ Publicado: 30/10/2023 | 10:49 pm
CIENFUEGOS.— «Siempre me siento insatisfecho, porque pienso que tenemos muchas potencialidades para hacer más. Creo que no estamos siendo sistemáticos con nuestros jóvenes, con los que están aquí. Hablamos mucho de los que se van, pero no podemos olvidar a los que siguen en Cuba a cargo de importantes responsabilidades».
Reflexiones como esta señaló Juan Carlos Díaz Pich durante la asamblea del 12mo. Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) del municipio de Cienfuegos. El joven trabajador de la refinería de petróleo Camilo Cienfuegos no obvió las cuestiones que habitualmente centran tales espacios, pero también destacó todo lo bueno que hoy la juventud cubana puede mostrar.
Miembro de una hornada de muchachos que no temen levantar la mano, Díaz Pich, de 32 años, también defendió que «hay que trabajar en la política de cuadros de las empresas, para que nos dirijan aquellos que realmente lo sientan por dentro».
El doctor Aliesky Villavicencio Verdecia, nefrólogo y director del Centro Especializado Ambulatorio Héroes de Playa Girón, milita entre esos que llevan su trabajo muy adentro. Reconoció el mérito de los que le acompañaban en el congreso y señaló a otros valientes que han asumido altas responsabilidades dentro del sector de la salud.
Hoy, su generación representa más del 50 por ciento del consejo de dirección del hospital provincial Gustavo Aldereguía Lima, y «parte de eso demuestra que estamos con esta Revolución a pesar de las dificultades. Son tiempos difíciles, pero no hay tarea que se resista a la juventud cubana».
Durante el encuentro, Aylin Álvarez García, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC, expresó que «en medio de tantas complejidades este pueblo y sus jóvenes se levantan todos los días con el deseo de transformar su realidad y hacerla mejor».
Ejemplo de ello resultó la historia de Odelvis Montiel Carpio, secretario del comité de base en la termoeléctrica Carlos Manuel de Céspedes, de Cienfuegos. Inició con la anécdota de un motor, los casi imposibles de su reparación y otras hazañas forjadas por el ingenio de los más bisoños que laboran con él en la generación de energía. El muchacho contó sobre la vitalidad de los innovadores y las Brigadas Técnicas Juveniles en una planta que se precia de su eficiencia y disponibilidad dentro del Sistema Electroenergético Nacional.
Y de la importancia de estos meses de congreso y, en especial, del proceso de fortalecimiento de la UJC en la base, habló Rafael Antonio Suárez, estudiante de tercer año de Medicina, el de su universidad transcurrió «a camisa quitada». Allí sus compañeros acordaron que «la organización tiene que estar constantemente fortaleciéndose, sobre todo, en el escenario docente y universitario».
A ponerles manos y esfuerzo al autoabastecimiento y a las tareas vinculadas con el programa de soberanía alimentaria convocó desde este encuentro Elizabeth Pérez, directora de la escuela primaria Abel Santamaría Cuadrado. Y para que ese llamado no fuera letra muerta, ya están en plena faena los primeros cien jóvenes que apoyan la recogida de café en el macizo montañoso de Guamuhaya.
Las intervenciones de esta jornada confirmaron que en Cienfuegos la UJC no solo se ocupa de reunirse, cotizar y entregar el acta. Aunque estos sigan siendo fantasmas de algunos comités de base, en otros se debate y actúa con el desenfado que caracteriza a la juventud de hoy.
En el teatro de la Universidad de Ciencias Médicas de la Perla del Sur, distinguida por la entrega de sus alumnos, las máximas autoridades del Partido y la UJC en la provincia reconocieron el aporte de estos muchachos que siguen trabajando por crear su felicidad.
Pensar, crear y hacer
LIMONAR, Matanzas.— Crear, hacer y pensar cómo construir una sociedad mejor en los tiempos actuales fue el hilo conductor de los debates de los delegados a la asamblea del 12mo. Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas, en este municipio, en la que se apostó por el trabajo con todos los jóvenes para contar con un territorio abanderado en la actividad agrícola y social.
La juventud limonareña ha logrado impactar en las medidas de ahorro de energía y en el enfrentamiento al delito, la corrupción y las ilegalidades, así como en la producción de alimentos, pero sobre todo en su compromiso con los retos actuales del país. De ello habló Isbel Benítez Amorós, secretaria del comité de base de la granja 5, perteneciente a la empresa genética de Matanzas.
Durante su intervención, la joven se refirió a la labor de las nuevas generaciones en el cuidado de los recursos, con recorridos de madrugada, y el control de la producción de leche que entregan los vaqueros. «En cierres operativos hemos detectado desvíos de yogur queso, leche, y hemos impedido en varias ocasiones el hurto y sacrifico de ganado mayor», relató.
Con la participación de la juventud de esa entidad se concluyó en el consejo popular Triunvirato, en una casita infantil que beneficia a 23 madres de ese centro y de la comunidad.
Por su parte, Gerardo Arguelles Paumier, maestro de la escuela primaria Andrés Santana, dedicó su análisis a la necesidad de fomentar la formación y orientación vocacional de los niños, adolescentes y jóvenes, sobre todo hacia las carreras pedagógicas.
Armando de la Caridad Águila Suárez, profesor del preuniversitario Antonio Berdayes, ahondó en los peligros actuales ante un enemigo que trata de que los jóvenes no crean en el sistema socialista cubano: «A nosotros nos toca motivar a los más nuevos por la historia de Cuba y dar a conocer en las redes todo lo que hacemos, porque a veces hay dudas y es bueno aclararlas».
Su tocayo, Armando García Delgado, primer secretario de la organización en la provincia, señaló críticamente la ausencia de reconocimiento a los innovadores mediante las Brigadas Técnicas Juveniles (BTJ), y exhortó a rescatar el movimiento de entrega del sello Forjadores del Futuro, para quienes aportan a la economía con soluciones a los problemas que se presentan en los centros de la producción y los servicios.
Carlos Humberto García González, primer secretario de la UJC municipal, contó cuánto se hace con los 408 jóvenes desvinculados del estudio y el trabajo. A 116 de ellos se les ofertó algún empleo, aseguró, al tiempo que destacó la prioridad en la atención a las amas de casa y resaltó el vínculo de la organización con la dirección de Trabajo municipal.
A convertir el comité de base en un espacio para el intercambio de ideas, con iniciativas y argumentos juveniles, sin esquematismos, llamó Yaliel Cobo Calvo, miembro del Buró Nacional de la UJC: «Hay que prepararse bien, porque la juventud es el motor impulsor de la Revolución, por tanto, nuestro trabajo cotidiano debe encaminarse a formar mejores jóvenes para garantizar un mejor futuro para nuestro país».
