La visita gubernamental a Granma, en la que participan unos 15 ministros, concluirá este viernes. Autor: Estudios Revolución Publicado: 13/01/2022 | 11:48 pm
BAYAMO, Granma.— No basta con que el Presidente de la República, el Primer Ministro y otros dirigentes nacionales estén en la calle. Es preciso que todos los dirigentes de la comunidad y del municipio estén en la calle, resolviendo los problemas del pueblo, con la sensibilidad que ello demanda.
Esta idea, expresada en Manzanillo por Manuel Marrero Cruz, miembro del Buró Político y Primer Ministro, fue uno de los ejes de la visita gubernamental a Granma, iniciada este jueves. Además, señaló la importancia de poner en el escalón más alto la atención al pueblo, la que muchas veces, en las estructuras institucionales, se relega a planos secundarios.
«Hay cosas que la gente nos está diciendo y la estamos multiplicando por cero, tenemos que hacer más gobierno en la calle», dijo refiriéndose a los cuadros que incumplen promesas o no escuchan ni visitan a la población. Por eso, recalcó, no puede haber miedo a dar la cara y es imprescindible cambiar la manera de trabajar con los asuntos más urgentes de los ciudadanos.
Esas reflexiones, realizadas ante cuadros administrativos y gubernamentales de Manzanillo, fueron conectadas con la visita del Primer Ministro al barrio de El Taíno, en la circunscripción 16 del consejo popular Orestes Gutiérrez, que presenta numerosas dificultades relacionadas con la vivienda, el alumbrado público, el abasto de agua y otros.
En esa comunidad de 1 773 habitantes, varios ciudadanos se acercaron al Primer Ministro, le plantearon inquietudes colectivas o problemas personales y le relataron conmovedoras historias de sus vidas. Al escucharlos con atención, Marrero Cruz señaló que nadie quedará desamparado.
Allí elogió la ardua tarea del delegado de esa demarcación, Yunior Heredia Tamayo, quien con 36 años se desempeña como delegado del Poder Popular y es a la vez el director municipal de Educación en Manzanillo.
Producción y servicios
La visita a esta oriental provincia, en la que también estuvieron el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, y los vice primeros ministros Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, Jorge Luis Tapia Fonseca, Inés María Chapman Waugh, Alejandro Gil Fernández y Jorge Luis Perdomo Di-Lella, comprendió el recorrido por varios sitios vinculados con la producción de alimentos.
Uno de estos fue el área conocida como Granma 2, en las afueras de Manzanillo, donde se realiza un intenso trabajo de desbroce de marabú con la intención de sembrar este año 500 hectáreas de plátano (hasta ahora se han plantado nueve), una cifra que conlleva esfuerzo, pero que, al decir del primer secretario del Partido en Granma, Federico Hernández Hernández, es posible lograr.
Si se concretara ese objetivo y un crecimiento posterior, se ayudaría mucho a Manzanillo, un municipio con 128 000 habitantes (104 000 viven en la ciudad) y que históricamente ha tenido problemas con el abastecimiento de productos agropecuarios.
El Primer Ministro insistió en que este proyecto se haga pensando en el hombre y sus condiciones de vida, por eso ponderó la idea de construir viviendas para los trabajadores agrícolas.
La comitiva pasó por el hospital provincial Celia Sánchez Manduley, donde el director de esa institución manzanillera, doctor Enrique Alejandro Matos Lastre, explicó a los visitantes, entre ellos el ministro de Salud Pública, doctor José Angel Portal Miranda, las dificultades constructivas de una edificación que ya tiene 41 años de explotación.
Sobre el particular, Marrero Cruz insistió en la trascendencia de ejecutar los mantenimientos planificados y también se refirió a la posibilidad de que las autoridades del territorio participen en las discusiones sobre la asignación de los presupuestos a instituciones de este tipo, de inestimable valor para la ciudadanía.
Asimismo, el Primer Ministro estuvo en la Empresa Pesquera Industrial de Granma (Epigran), en la lisetera de la Ciudad del Golfo y en el restaurante Brisas del mar. A su paso por áreas del malecón manzanillero, intercambió con vecinos que se acercaron a saludarlo y criticó el cierre de la panadería La Perla, que expendía el llamado pan especializado.
Turismo y desarrollo
En la intensa agenda del dirigente estuvo la visita al hotel Farallón, del complejo hotelero Club Amigo Marea del Portillo-Farallón del Caribe, en el costero municipio de Pilón. Allí se interesó por las labores que se realizan para volver a incorporar a esa instalación a la oferta turística de Cuba.
Además, llegó al reparto Latinoamericano, conocido popularmente como Jabaquito, que está ubicado en Bayamo. En ese sitio dialogó con algunos de sus habitantes y con Carlos Arvey González Arias, delegado de la circunscripción 112 del consejo popular Francisco Vicente Aguilera, quien le explicó algunas de las labores que se acometen para transformar la comunidad, con varias familias vulnerables.
En la Ciudad Monumento, Marrero Cruz inauguró, junto al ministro de Justicia, Oscar Silvera Martínez, la nueva sede de la Dirección provincial de Justicia. En ese flamante recinto intercambió con trabajadores del sector. El colofón de la jornada fue la celebración de la asamblea municipal extraordinaria del Poder Popular en Bayamo, en la que también participó Salvador Valdés Mesa, y se abordaron las estrategias de desarrollo y el plan de presupuesto para el año 2022.