Características del sistema eléctrico en Isla de la Juventud Autor: Cortesía de la fuente Publicado: 19/01/2021 | 11:29 am
NUEVA GERONA, Isla de la Juventud.— La estrategia de desarrollo energético en este Municipio Especial apunta a lograr el 24 por ciento de penetración al sistema local mediante Fuentes Renovables de Energía (FRE) en el 2030, esencialmente con la solar fotovoltaica y biomasa forestal.
Así lo asegura el ingeniero Antonio Figueredo Matos, especialista principal del grupo de desarrollo subordinado a la Dirección Técnica de la empresa eléctrica local, quien reveló además, que la proyección del trabajo en ese sentido se definió en etapas.
«La primera (2020 al 2025), ya en marcha y aprobada a todas las instancias, cuenta con financiamiento y pretende incrementar la participación de las FRE hasta un 19 por ciento, tras lograr estabilidad en la red mediante y el incremento de otros 14 Megawatts pico (MWp) de energía fotovoltaica, (potencia generada por los paneles mientras hay sol) y la instalación de sistemas de acumulación para cuatro Megawatts (MW)», dijo.
«En la segunda etapa (2025 al 2030) se instalarán 7 MWp y 6 MW de acumulación, que sumados a los anteriores completan la estrategia de llegar al 24 por ciento, como exige la política del país; ya para entonces con mayor estabilidad, para que no afecte el servicio», comentó.
Penetrar la matriz energética nacional con energía limpia en un 24 por ciento significa que el resto de la producción de electricidad sigue dependiendo del combustible fósil. Esta proyección cobraría mayor eficiencia si se desplazara el pico de consumo del horario nocturno (cuya demanda se genera con fuel oil) hacia el momento en que las FRE inyectan energía al sistema, por el día.
Figueredo Matos acotó que al terminar cada etapa, parte de la demanda nocturna pudiera respaldarse con generación por FRE, aunque todavía sería pequeño el aporte.
«La estrategia se basa, fundamentalmente, en explotar los recursos que existen en el territorio: el sol, las líneas eléctricas cercana a los lugares donde se enclavarán los sistemas fotovoltaicos, el aire y la biomasa forestal —más del 60 por ciento de las tierras pineras son bosques—. Hoy estudiamos cual es la tecnología de biomasa forestal más eficaz y de mejor posibilidades de explotación», aclaró.
Entre las principales limitaciones, el ingeniero señala la vulnerabilidad del sistema frente a eventos meteorológicos como los ciclones (sólo el 15 por ciento de las redes eléctricas están soterradas), y la existencia de tres subsistemas aislados, que no se comunican entre sí, en Cayo Largo del Sur, la comunidad costera de Cocodrilo y la parte norte de Isla de la Juventud.
«Otra restricción es que, al estar aislado del Sistema Energético Nacional, el costo de la generación es muy alto por concepto de transportación de la materia prima, y como la tecnología instalada es en más del 90 por ciento de importación, se dificulta la sostenibilidad del sistema».
Esa es una de las razones por las que este territorio apunta su estrategia energética a una mayor participación de las FRE en la generación. Se pretende cumplir con uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles relacionados con el acceso de todos a una energía no contaminante (política que Cuba suscribe), pero todavía prevalece en el territorio el uso de combustible fósil en un 95 por ciento. La eólica representa un uno por ciento, la biomasa, con índices muy bajos, no incide en la matriz, y la solar apenas aporta un cuatro por ciento.
La generación con FRE, no solo ahorra combustible fósil, también disminuye la carga contaminante a la atmósfera y el calentamiento global, por lo que desde el punto de vista medioambiental, el saldo es favorable.
El uso de fuel oil prevaleció en la matriz energética en Isla de la Juventud durante 2020. (Infografía: cortesía de la fuente).