Es la lactancia materna la forma idónea de nutrición para los lactantes y niños pequeños. Autor: Tomada de www.saludvida.sld.cu Publicado: 21/09/2017 | 06:35 pm
Consternada, después de saber que con dos meses de nacida ya Verónica no recibe leche materna por decisión de su madre, intenté explicarle a ella que no solo se trata de ignorar lo que la Organización Mundial de la Salud establece como correcto, necesario, insustituible para la salud de su bebé sino también lo que para ella resulta beneficioso y para las dos, desde el punto de vista emocional.
Este organismo internacional asevera que es el único alimento que le puede garantizar más de la mitad de los nutrientes y las necesidades energéticas al niño entre los 6 y los 12 meses, y un tercio entre los 12 y los 24 meses, por lo que debe ser suministrada de forma exclusiva hasta los seis meses y mantenida hasta los dos años mientras se le proporciona la alimentación complementaria.
Tiene que ser así porque yo tengo que empezar a trabajar, me dice la madre de Verónica, y continué sin entender. Pocos países como Cuba tienen una legislación como el Decreto Ley 234 que establece que durante un año la madre puede quedar al cuidado de su descendencia, recibiendo el 60 por ciento de su salario, siendo este además el tiempo idóneo para crear lazos afectivos irrompibles después entre la madre y su hijo. La legislación también le otorga el derecho de los padres a cuidar de sus hijos después de que hayan cumplido sus tres meses de nacidos, potenciando al menos en ese período esta práctica que es vital.
Ella, la madre de Verónica, como otras mujeres, afirman conocer niños que crecieron y se desarrollaron sin recibir leche materna tanto tiempo. ¿Cómo hacerle entender que no existe otra fuente de carbohidratos, proteínas, grasa, vitaminas, minerales, anticuerpos y hormonas tan completa como esta? ¿No imaginan que ingerir agua o algún otro líquido en ese período pone al niño o la niña en riesgo de padecer enfermedades diarreicas y desnutrición? Hay que tomar en cuenta que no siempre las medidas higiénicas se cumplen a cabalidad durante la manipulación y elaboración de los alimentos, y es un peligro al que se exponen los bebés sin necesidad alguna.
La doctora Gisela Álvarez Valdés, jefa del Grupo Nacional de Puericultura, afirma que de los bebés que se enferman con menos de un año, la mayoría no recibió leche materna. Quienes sí tuvieron esa dicha padecerán menos alergias, infecciones del oído, gases, diarrea y estreñimiento, enfermedades de la piel y respiratorias, infecciones estomacales o intestinales. Tendrán, además, menos riesgos de presentar luego diabetes mellitus, caries, obesidad, entre otros.
La especialista insiste que la leche materna provee al bebé de los factores inmunológicos que requiere y promueve además el desarrollo sensorial y cognitivo. El calostro es esa primera producción de leche materna después de dar a luz, y es muy importante que la madre se la proporcione a su hijo porque es rica en inmunoglobulinas, leucocitos y lactoferrina.
«Cada día se registran más enfermedades propias de la adultez en edades tempranas como la hipertensión, la diabetes mellitus y la obesidad, y las investigaciones realizadas no descartan la lactancia materna como un factor de protección ante ellas, sin olvidar que la relación entre esta práctica y el elevado cociente de inteligencia en los niños es estrecha».
La lactancia materna es considerada además una práctica clave para el desarrollo sostenible, concepto que se relaciona con la satisfacción de las necesidades del presente sin comprometer las capacidades de las generaciones futuras, recordando también que no se requiere de envases, papel, combustibles ni transporte como sí sucede con las leches artificiales, inicuas para el medio ambiente.
Afirma Álvarez Valdés que precisamente para ponderar esta práctica esencial en Cuba se garantiza el suministro de leche materna a los niños prematuros y de bajo peso al nacer, a los que tienen dificultades para ser amamantados, a los operados, a aquellos a los que su madre no pueda ofrecérsela y a otros que lo necesiten, gracias a la existencia de bancos de leche materna, que dependen de las donaciones voluntarias de las madres que lactan a sus hijos.
En la actualidad se dispone de este tipo de instituciones en La Habana, Pinar del Río, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Camagüey, Las Tunas, Holguín, Santiago de Cuba, Guantánamo y Granma, y en ellas se procesan las reservas sin modificar sus características nutricionales e inmunológicas, evaluando también las calorías y proteínas.
La lactancia materna es fundamento de la vida, tal y como lo afirma el slogan de esta jornada. Sin embargo, no solo los beneficios son para Verónica, le explico a su madre. El vínculo que se establece entre madre e hijo es único, y es la oportunidad perfecta para disfrutar de ese lazo emocional con favorables resultados desde el punto de vista psicológico.
Además, la doctora Álvarez Valdés precisa que la madre también disfruta de los beneficios de amamantar a su bebé porque pierde más fácil las libras adicionales que ganó durante el embarazo, se reduce el riesgo de hemorragia posparto y la probabilidad de que luego padezca cáncer de útero o de mama.
RECUADRO: RECOMENDACIONES NECESARIAS
-Dale solo el pecho a tu bebé hasta sus 6 meses de edad. No le brindes otro alimento, ni siquiera agua.
-Continúa la lactancia materna hasta que tu hijo tenga 2 años de edad, aunque consuma otros alimentos.
-No fumes para cuidar tu salud y la de tu hijo
-Bríndale el pecho cada vez que lo pida, no cuando lo creas conveniente.
-Procura vaciar ambos senos en la tetada. De no ser así, la próxima vez que lactes, comienza con la mama que no se vació del todo.
-Antes de dar el pecho, lávate bien las manos con agua y jabón
-Toma abundante líquido
-No uses el tete ni el biberón
-Acude regularmente a las consultas de puericultura.