SANCTI SPÍRITUS.— Alrededor de 168 ilegalidades que afectan el medio ambiente de la cuenca Zaza se combaten aquí, como resultado de una estrategia que persigue restablecer el orden y evitar daños en el segundo acuatorio más extenso del país.
Quienes recorran o naveguen por la extensa área de la cuenca, pueden encontrar entre las violaciones más recurrentes los vertimientos de residuales de cochiqueras, pertenecientes tanto a criadores particulares como a integrados a convenios con la empresa porcina del territorio, declaró Ciro Rodríguez Rodríguez, subdirector de la Dirección de Planificación Física en Sancti Spíritus.
Señaló también la existencia de varios sembrados ubicados cerca de las márgenes de las corrientes fluviales o presas, así como la toma de agua no autorizada.
Según estadísticas de la Dirección Provincial de Planificación Física en Sancti Spíritus, alrededor de 40 ilegalidades ya se han eliminado y se refuerzan las acciones para erradicar otras, a fin de preservar el medio ambiente en el mayor acuatorio del centro de la Isla, con un área de alrededor de 2 413 kilómetros cuadrados, cuyo 80 por ciento pertenece a la provincia de Sancti Spíritus y el resto a Villa Clara.
Por ello, especialistas de diferentes entidades del territorio, como la Unidad de Medio Ambiente (UMA), del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), la Delegación Provincial de Recursos Hidráulicos, la Dirección Provincial de Suelo y el Servicio Estatal Forestal, velan mediante inspecciones por el comportamiento de estas ilegalidades, lo que posibilita disminuir los volúmenes de carga contaminante.
Aunque la cuenca Zaza es punto de mira de varios organismos e instituciones espirituanas, todavía su cuidado y preservación precisan de más empuje de los engranajes estatales y de una mayor responsabilidad pública de quienes provocan que varias ilegalidades se cometan aquí contra el medio ambiente.