El bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por Estados Unidos a Cuba hace más de medio siglo propicia el robo de marcas comerciales de la isla caribeña.
Tal acción es amparada por las autoridades federales del país norteño, escudadas en las regulaciones de esa política abrumadoramente rechazada por la comunidad internacional en Naciones Unidas.
Esta semana, una comisión federal norteamericana juzgó que la empresa General Cigar Co. Inc., puede seguir utilizando el nombre de la marca registrada Cohiba para sus puros en Estados Unidos.
Es el fallo más reciente en una batalla legal de casi 16 años con la empresa nacional cubana de puros por esa marca, precisa el sitio digital Cubadebate.
General Cigar, con sede en Richmond, Virginia, y subsidiaria de la sueca Match AB, indicó que la Comisión de Juicios y Apelaciones sobre Marcas Registradas rechazó el pedido de Cubatabaco de que fuera cancelado el uso del nombre por parte de la firma estadounidense, apuntó el portal.
La comisión falló que, como los tribunales decretaron que Cubatabaco no puede vender sus puros en Estados Unidos a causa del bloqueo impuesto a Cuba, carece de personalidad jurídica para litigar en ese país por la marca registrada Cohiba.
General Cigar alegó que vendió sus puros Cohiba de procedencia dominicana en Estados Unidos desde principios de la década de 1980, y recibió su primer registro de esa marca en territorio estadounidense en 1981.
Cohiba es la marca de mayor prestigio en el mundo del tabaco y fue creada en 1966, adquiriendo fama rápidamente a partir del registro de la marca en 1969.
En 1492 los primeros pobladores de la isla de Cuba conocían y empleaban la planta del tabaco y llamaban Cohiba al rollo rústico de la solanácea que fumaban.
Comenta la fuente que las hojas utilizadas en la elaboración de Cohiba son «la selección de la selección» de las cinco mejores Vegas de Primera de las áreas de San Juan y Martínez y San Luis, en la occidental región de Vuelta Abajo.
Bajo similares pretextos —recordó Cubadebate— tribunales federales en Estados Unidos respaldaron el robo de la famosa marca de ron cubano Havana Club por parte de la compañía Bacardí, en otro soberano desconocimiento a las regulaciones internacionales sobre marcas, patentes y propiedad intelectual.
(Granma)