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Jóvenes debaten sobre detonantes de la epopeya del Moncada

Estudiantes y profesores de la Universidad de Ciencias Informáticas compartieron con especialistas sobre las condiciones de la Cuba de los años 50, como preludio  de la Revolución Cubana

Autor:

Mayte María Jiménez

Una mirada a la historia, las condiciones económicas y las vivencias de la Cuba de los años 50 del pasado siglo, como antecedentes de la Revolución que gestaran los jóvenes de la Generación del Centenario, fue el punto de partida del foro debate que sesionó este jueves en la Universidad de Ciencias Informáticas, en La Habana.

Junto a estudiantes y profesores de la institución, un grupo de especialistas dialogó sobre las circunstancias y vicisitudes de aquella época en el país, a propósito de la celebración, este año, del aniversario 60 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes.

El Doctor Juan Carlos Alfonso, director del Centro de Estudios de Población y Desarrollo, presentó a los jóvenes un análisis estadístico sobre las condiciones de vida, las características demográficas y socio-culturales de los pobladores del archipiélago, especialmente en las zonas rurales, donde la mala nutrición y otras precariedades hacían de los habitantes de esas regiones blanco de las enfermedades y la muerte a temprana edad.

Gloria García, investigadora del Instituto de Historia de Cuba (IHC), recordó la paradójica situación entre el desarrollo de la industria azucarera y las posibilidades reales de mejoramiento de los niveles de vida de los cubanos.

A ello se sumaba la penetración del capital norteamericano y la monopolización de la economía de la nación, factores que incrementaban los males sociales como resultado de las marcadas diferencias de clase, agregó el profesor de la Universidad de La Habana, Miguel Figueras.

Los especialistas explicaron a los estudiantes que la compleja realidad política y social, marcada por la dictadura de Fulgencio Batista, motivó la rebelión del 26 de Julio y la búsqueda de un nuevo paradigma social, plasmado por Fidel en el alegato La Historia me absolverá.

El joven profesor Yudel Meriño, de la UCI, significó la importancia de que las nuevas generaciones busquen esas referencias históricas para defender y perfeccionar nuestro sistema socialista, inspiración para América Latina.

Organizado por el Instituto de Historia de Cuba, la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado, y el Ministerio de Educación Superior, el encuentro contó también con la presencia de Eugenio Suárez, director de la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado, y René González Barrios, director del Instituto de Historia de Cuba.

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