CAMAGÜEY.— La vasectomía en hombres ha sido revertida con éxito en tres pacientes del Hospital Universitario Manuel Ascunce Domenech, quienes anteriormente se habían sometido a la intervención quirúrgica que los imposibilitaba para tener descendientes.
Ante la necesidad de procrear, el equipo de urólogos de este centro de salud, liderado por el doctor Juan Carlos Yip Felipe, propuso a las parejas la novedosa posibilidad, poco difundida en el mundo, incluida Cuba, porque no hay hasta el momento estudios referenciales.
«Los tres casos de parejas conyugales fueron sometidos a estudios previos, que al ser realizados en la consulta de infertilidad masculina de la provincia, confirmaron no solo la ligadura del Conducto Deferente (vía que permite el tránsito de los espermatozoides desde el epidídimo, reservorio de estos, hasta el exterior), sino también la infertilidad del hombre», explicó el doctor Yip Felipe.
Los intervenidos quirúrgicamente, según el especialista, ya cosechan resultados muy favorables. «En breve una de las parejas tendrá un nuevo hijo, a una segunda se le comprobó un conducto deferente permeable que permite la presencia de espermatozoides en el semen; y el tercer caso, último intervenido hasta el momento, ya está en vías de estudios demostrativos».
El también especialista de primer grado de Urología destacó la importancia del conocimiento de esta opción en la pareja para revertir el propósito inicial de la anticoncepción masculina.
«Lo anterior —valoró— es una puerta abierta para entender la anticoncepción no solo como una responsabilidad femenina, sino también del hombre, que puede asumir un rol protagónico ante el deseo y necesidad matrimonial de procrear».
Insistió en que es importante conocer que el hombre no pierde ningún elemento fisiológico de su vida sexual activa al someterse a la vasectomía, y que al repararse esta recupera totalmente su fertilidad.
El proceder quirúrgico iniciado aquí consiste en reparar el conducto deferente. «El resarcimiento se efectúa a través de un método poco agresivo o invasivo para el organismo, que permite una recuperación rápida del individuo, así como su plena incorporación social y sexual», subrayó el doctor Juan Carlos.