El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Ricardo Alarcón de Quesada, anunció este viernes en el espacio de la Mesa Redonda que la defensa de los cinco antiterroristas cubanos presentó ya la respuesta a la oposición del gobierno estadounidense para que la Corte Suprema revise el caso.
Aunque tenían diez días para exponer los argumentos que respondieran al documento presentado por la Fiscalía el viernes 22 de mayo, los abogados defensores de Gerardo Hernández, René González, Antonio Guerrero, Fernando González y Ramón Labañino entregaron este miércoles 27 —solo dos días después— el documento que vuelve sobre las razones para pedir que la máxima autoridad legal de los Estados Unidos revise el caso, y que este forme parte del escaso dos por ciento que cada año toma la Corte.
«¡Tanta prórroga para comenzar mintiendo!», comentó Alarcón, quien recordó que Washington había pedido en varias ocasiones más tiempo para, al final, presentar su oposición a la propuesta de revisión de la defensa, apoyada además por los 12 Amicus curiae (Amigos de la corte).
Alarcón explicó que el documento presentado por el gobierno —respondido ya por los defensores para evitar cualquier excusa que intente demorar— miente desde el primer párrafo, porque insiste —aunque ha sido reconocido por otros circuitos que no es cierto—, en que nuestros cinco luchadores antiterroristas reunieron y transmitieron información secreta. Incluso, cuando la Corte de Apelaciones de Atlanta ya había anulado esos cargos.
El Presidente del Parlamento cubano precisó que nuestro documento parte de recordar que este ha sido el único juicio condenado por las Naciones Unidas, y que las autoridades norteamericanas ignoran los Amicus presentados por miles de personalidades en el mundo, en una cantidad sin precedentes enviados a la Corte.
Detalló los cuatro argumentos esenciales en los que se basa la nueva respuesta de la defensa: 1) La discriminación racial en la selección del jurado, 2) La parcialidad de la sede o la necesidad de una sede justa, 3) La ausencia de pruebas contra Gerardo Hernández en la supuesta implicación en el derribo de las avionetas, 4) El hecho de que la Corte de Apelaciones de Atlanta ya había anulado las sentencias de dos de los cinco acusados del mismo cargo que Gerardo; sin embargo solo a él se mantuvo la sentencia.
Está demostrado que las acusaciones iniciales eran falsas; la Corte de Atlanta ya había dicho que no hubo búsqueda o transmisión de información secreta; no obstante las autoridades se mantienen cometiendo el delito de prevaricación por más de diez años.
«El gobierno prevaricó y también prevaricaron los jueces», apuntó.
Durante la Mesa Redonda, Alarcón subrayó las implicaciones negativas de la errónea y reprobable actuación de los jueces y del gobierno federal en el ejercicio de sus funciones.
«Lo más importante es que estamos en la primera fase de la batalla: lograr formar parte del dos por cierto de casos que son revisados por la Corte», insistió, al tiempo que recordó que el máximo tribunal deberá pronunciarse alrededor del 15 de junio.
«La única solución es el retiro de las acusaciones falsas presentadas por el gobierno y el regreso (de los Cinco) a Cuba... El Presidente de los Estados Unidos puede hacerlo», dijo el titular de la Asamblea Nacional del Poder Popular, quien recordó cómo a dos espías, que sí recopilaron información sensible para un Estado extranjero, les fueron retirados los cargos por la Casa Blanca.
«Si el presidente Barack Obama quiere convencer al mundo de que en verdad hay un cambio, tiene que demostrarlo con hechos y no con palabras», apuntó.
Durante el espacio televisivo también se abordó «el giro interesante» que ha tenido el enjuiciamiento de Posada Carriles, quien por primera vez es involucrado con el asesinato de Fabio Di Celmo, aunque solo se le acusa de haber mentido cuando las autoridades le preguntaron si conocía al salvadoreño que colocó las bombas de 1997 en los hoteles cubanos.
José Pertierra, abogado que representa a Venezuela en el proceso de extradición de Posada, sostuvo que en este tema hay incumplimiento malicioso de la justicia, porque aún el terrorista no es procesado por los verdaderos crímenes cometidos. Además, expuso que se continúan haciendo gestiones en el marco de organizaciones como las Naciones Unidas o el Movimiento de Países No Alineados (NOAL) para presionar a Washington y que se acepte la extradición.
«Posada no es un mentiroso, es un terrorista», aseguró.
Casi al final, el letrado coincidió con el titular del Parlamento cubano: «El Presidente de EE.UU. puede cambiar la situación de ambos casos, liberar a los Cinco y enjuiciar a Posada Carriles».