Porque es asunto cardinal y estratégico para la sociedad cubana, la Unión de Jóvenes Comunistas no ha dejado de valorar la atención política al proceso de ingreso a las carreras pedagógicas. Este martes, en reunión del Buró Nacional de la organización, el tema constituyó punto de partida para un extenso análisis.
«Nuestra máxima aspiración es que los jóvenes entiendan la necesidad de incorporarse a las carreras pedagógicas; lo asuman conscientemente, motivados, y como un compromiso de estos tiempos con la Revolución», expresó el primer secretario de la UJC, Julio Martínez Ramírez.
A modo de pórtico de una reflexión colectiva que abordó múltiples aristas, el Primer Secretario hizo hincapié en la necesidad de que los dirigentes de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM) sean ejemplos en la disposición para incorporarse a carreras pedagógicas. «No siempre hemos logrado esa actitud, esa motivación que pondría a esos jóvenes en mejores condiciones de captar a otros estudiantes».
El dirigente juvenil habló de «tomar como referente el compromiso y la actitud de generaciones anteriores, como las incorporadas al Contingente Manuel Ascunce Domenech o, más recientemente, los «cien valientes», precursores de los profesores generales integrales. Fueron grandes tareas que identificaron a muchos jóvenes capaces de dar el paso al frente, que se forjaron en el ejercicio de una profesión muy valiosa».
Otras ideas subrayadas por Julio Martínez versaron sobre la importancia del trabajo diferenciado con quienes optan por carreras pedagógicas; así como la adecuada selección y preparación de los dirigentes estudiantiles y juveniles en los Institutos Superiores Pedagógicos, lo cual haga posible una labor más eficaz en aras de motivar al estudiantado con el oficio del magisterio.
«Estamos llamados a multiplicar todo lo alusivo a la formación vocacional en los colectivos pioneriles y en los centros de la Enseñanza Media Superior», destacó en otro momento el Primer Secretario de la Juventud, quien además comentó la necesaria atención que los Institutos Vocacionales de Ciencias Pedagógicas deben brindar a los jóvenes maestros en vías de formación.
De acompañar a los Profesores Generales Integrales que imparten la docencia lejos de sus territorios; de que la UJC y la FEU atiendan cercanamente a los universitarios que ofrecen clases en aulas de la Enseñanza Media; de fomentar la vocación desde edades tempranas; de evadir en un tema como este los enfoques a ras de las cifras (aunque los números encierran retos y verdades que no pueden soslayarse); de continuar acrecentando el prestigio del maestro, así como la calidad y permanencia de quienes ingresan a las carreras pedagógicas, hablaron los dirigentes que tomaron parte en la reunión del Buró Nacional.
La titular de Educación, Ena Elsa Velázquez Cobiella, recordó que en todo momento, desde el triunfo de 1959 hasta hoy, formar maestros ha tenido un «sustento político», y ha sido no solo un empeño del MINED —institución que es la máxima responsable en formar a los maestros— sino también de todas las organizaciones y fuerzas de la sociedad, sin las cuales no puede pretenderse alcanzar los resultados a que aspira el Ministerio.
Es verdad que el maestro trabaja mucho, reflexionó la Ministra, pero en la medida en que se vaya logrando una reserva de profesionales en las escuelas, la labor de los que están será un poco más holgada, con mayor margen para la preparación individual.
Ena Elsa hizo referencia a los empeños por retomar la experiencia de los Contingentes Pedagógicos; anunció que para el curso próximo serán priorizadas las carreras de Profesor General Integral de escuela Secundaria Básica, y de Primaria, «porque pensamos que son enseñanzas decisivas en el futuro de los estudiantes»; e hizo énfasis en garantizar la preparación del maestro en temas esenciales como la enseñanza de la Historia, la educación de valores, la prevención, y el trabajo con la lengua materna.
La miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, Lázara Mercedes López Acea, resaltó el valor de atender diferenciadamente a los estudiantes que eligen estudiar carreras pedagógicas; darle seguimiento a la actitud que muestran ante el estudio, ayudarlos desde temprano a resolver cualquier deficiencia que tengan en su preparación.
Sobre los pre pedagógicos, Lázara Mercedes compartió la idea sobre la necesidad de fortalecer los claustros; así como de elevar en los Comités de Base de esos centros docentes la exigencia ante el estudio, la disciplina y la formación integral del estudiantado.
Hacia el final del análisis, Julio Martínez reflexionó que: «No perdamos de vista el número de jóvenes que hoy tenemos dando clases, y que si hemos asumido múltiples transformaciones en el sistema de enseñanza, es porque ellos dieron antes el paso al frente para engrosar las filas del sector educacional. El reto es no haber logrado aún que quienes ostentan mejores resultados sean quienes den el paso al frente. Cambiemos eso».
La responsabilidad de las nuevas generaciones con el destino del país —expresó el Primer Secretario de la UJC—, no solo pasa por la disposición de defender el suelo patrio si fuera agredido militarmente, sino también por estar dispuestos a dar el paso al frente en un asunto como el de las carreras pedagógicas. Pero no es una batalla, dijo, que pueda ganarse en una conversación, de un día para otro, sino que pasa por un trabajo consecuente, que implica permanencia y coherencia.