Morón, Ciego de Ávila.— Durante la asamblea de la FEEM en el municipio de Morón, un estudiante preguntó: «¿Quiénes hacen funcionar la organización, los alumnos o los profesores?». La respuesta parece obvia, pero la vida es más versátil que un manual de teorías.
El mismo joven decía: «Tienen que ser los alumnos»; pero alegaba que los profesores son los que deciden y a veces hasta imponen las actividades y las decisiones que deben adoptar los estudiantes.
Su planteamiento generó polémicas; sobre todo, al juzgar las opiniones y criterios de otros delegados, porque si bien es cierto que existen docentes que se inmiscuyen en el funcionamiento interno, también es verdad que existen otros que ayudan a que la FEEM responda a los intereses del estudiantado.
«La FEEM es de los estudiantes, por eso somos nosotros los que tenemos que hacerla funcionar; sin un verdadero funcionamiento, no habrá autoridad ni ante los profesores ni mucho menos ante los alumnos», apuntó Yarisleibys Pedroso Fadraga, presidenta de la organización en el Politécnico de Informática.
Pero el asunto va más allá de una declaración de principios. la organización estudiantil está urgida de propiciar el debate sobre el liderazgo y hacer marcar, entre sus miembros, que el más popular, el mejor vestido, el más actualizado en las modas no es necesariamente el que mejor puede representar los intereses del grupo.
«Tenemos que cambiar los referentes —decía Lázaro Alfonso, uno de los delegados. Puede dar risa, pero es así. A veces en el grupo se elige como presidente al que más gel se echa en el pelo. Y eso denota, entre otras cosas, un pobre funcionamiento interno».
Otros participantes coincidieron en que únicamente el rescate de la iniciativa por parte de los estudiantes, con hechos concretos y sin tanta teoría y llamados a la acción, es lo que puede romper la inercia que se aprecia en determinados centros de la Enseñanza Media del municipio.
Ricardo Yanes, director de Educación en la provincia, puntualizó que uno de los primeros deberes del maestro es defender los derechos de los estudiantes.
«La FEEM es parte del consejo de dirección de los centros. Ustedes tienen espacios suficientes para debatir cuando se presentan situaciones como las analizadas aquí. Pero son los primeros que tienen que ganarse ese rol de entes activos», apuntó.
Ese nivel de iniciativas por parte de la FEEM es más urgente en Morón. De acuerdo con datos informados en la asamblea, desde 2002 hasta los primeros días de 2008 ese municipio ha perdido docentes a un ritmo de 60 maestros por año.
Pero un comportamiento así no será superable si la organización no interviene en la formación vocacional. Por eso, en opinión de este periodista, los acuerdos más importantes de la asamblea fueron los de rescatar las actividades con los monitores, la realización de conversatorios con educadores y las acciones de los alumnos para reconocer el trabajo de profesores y familias cuyos hijos den su disposición para estudiar en el Pedagógico.
Queda, entonces, que estas iniciativas se materialicen y que la improvisación no termine devorándolas. «Primero hay que hacer y luego decir. Nadie hará lo que nos toca a nosotros —dijo el estudiante Ricardo López. Si tenemos que convencer, si queremos que algunos profesores tengan conciencia de nuestra labor, nosotros mismos tenemos que salir de la rutina y convertirnos en vanguardias».