Gamal Abdel Nasser (a la derecha), como uno de los líderes fundadores del Movimiento NOAL, apoyó a la naciente Revolución Cubana, y Egipto sigue considerando importante la labor de Cuba en pro de la unidad. «Tengo toda la seguridad de que Cuba se ha preparado muy bien para la realización de esta Cumbre, que será exitosa, sobre todo gracias al papel que desempeñarán Cuba y el conjunto de la troika del Movimiento, que reiterarán la necesidad de respeto a la ley internacional, de justicia en las relaciones entre países, y de proporcionar condiciones adecuadas para que los pueblos del mundo logren el progreso y el desarrollo en paz».
Así lo declaró el embajador de la República Árabe de Egipto, señor Abdel Fattah Ezzeldin, en conversación con nuestro diario acerca de la ya cercana XIV Conferencia Cumbre del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL).
La nación norafricana, que asumirá la presidencia del Movimiento en 2009 e integrará desde este momento la troika directiva junto con Malasia y Cuba, es miembro fundador de los No Alineados. «Cuando el presidente Gamal Abdel Naser participó en la elaboración de las bases del MNOAL, la implicación egipcia representaba una necesidad histórica, pues el mundo era bipolar, y los dos bloques se disputaban el apoyo de los países del Tercer Mundo. Dichos principios se dirigían a aliviar tensiones y trabajar por la paz, que no es posible sin hacer valer la ley internacional y la justicia».
—¿Qué perspectivas tiene del papel de Cuba como presidenta del MNOAL?
—Cuba presentará proyectos muy útiles y beneficiosos en el contexto de la colaboración Sur-Sur, entre ellos el de apoyo a programas de alfabetización, pues el analfabetismo es el mayor obstáculo para el progreso de las naciones pobres, y el de preparación de profesionales de la Medicina, lo que significa prestar atención al bienestar de los ciudadanos del Tercer Mundo.
«Entiendo también que Cuba presta mucha atención a la unidad del Movimiento, y nosotros la apoyamos. Cualquier Movimiento obtiene fuerza a partir de la cantidad numérica y de compartir puntos de vista».
—Usted ha mencionado la paz como uno de los principios del MNOAL. Paradójicamente, Egipto se encuentra en una de las zonas del mundo más golpeadas por la violencia…
—La causa palestina es la esencia del conflicto en el Oriente Medio. Nuestro país, desde hace mucho tiempo, realiza esfuerzos para terminar con ese conflicto. Siempre hemos abogado por una solución permanente y justa, y el criterio internacional estipula la creación de un Estado palestino junto a Israel. Alcanzar esto es lo único que conduciría a la paz efectiva en la región, pues si los palestinos no obtienen sus derechos, continuará la inseguridad.
«Nosotros hemos efectuado gestiones mediadoras, y constantemente presentamos proyectos de resolución en los foros internacionales a favor de la paz. La necesitamos enormemente, porque ningún Estado puede desarrollarse sin ella, y con el derroche de recursos en pro de la guerra».
—¿Quién encabeza la delegación egipcia a la cita de La Habana?
—Lamentablemente, los acontecimientos acelerados y violentos en nuestra región impiden al presidente Mubarak asistir a esta Cumbre, si bien conozco su deseo de visitar el continente latinoamericano.
«Será nuestro experimentado y joven ministro de Relaciones Exteriores, quien estará al frente de la delegación como representante del presidente de la República, y participará no solo en las actividades de la Cumbre, sino que sostendrá encuentros con altos funcionarios cubanos y con otras delegaciones, además de tomar parte en la minicumbre del Grupo de los 15».
—¿Cuál es el estado de los nexos entre Egipto y Cuba?
—Existe una cooperación mutua y estrecha desde hace mucho tiempo, caracterizada por la proximidad y la coincidencia de criterios respecto a cómo solucionar los conflictos internacionales. Cuba y Egipto se apoyan tanto en la adopción de resoluciones, como en las propuestas para ocupar cargos en las organizaciones internacionales.
«En cuanto al intercambio comercial, es limitado por las distancias geográficas. No obstante, en el campo de la Medicina, podemos aprovechar el desarrollo de Cuba en la producción de vacunas y otros medicamentos, y sobre todo, los avances biotecnológicos. En el sector del transporte, Egipto puede ayudar, a partir de su larga experiencia en el transporte ferroviario. Tenemos además un alto grado de desarrollo en la producción de alimentos, y podríamos incentivar la colaboración en la industria azucarera.
«Los lazos culturales son muy activos. Ejemplo de ello es la segunda muestra de cine egipcio en Cuba, que tendrá lugar del 10 al 16 de septiembre, con excelentes películas en el cine Chaplin. Asimismo, el pueblo egipcio podrá disfrutar en septiembre de magníficas exhibiciones del Ballet Nacional de Cuba, en El Cairo y Alejandría.
«Los egipcios tenemos una idea muy positiva y constructiva de Cuba, de su Revolución, de sus líderes, de su pueblo, de su caña de azúcar, su música bailable, sus lindas playas y su famoso tabaco».