Los que soñamos por la oreja
Como prometí en una anterior emisión de esta columna en Juventud Rebelde, hoy continúo sugiriéndoles a mis lectores la audición de algunos discos internacionales a los que he podido acceder en fecha cercana, y que me han impresionado gratamente. Por esta vez, quiero hablarles de tres títulos fonográficos, a saber, Stoney Curtis Band Live, del guitarrista Stoney Curtis; Junkyard Hearts, del cantautor Joseph Arthur; y de Ed Calle plays Santana, del saxofonista Ed Calle.
En el caso del álbum Stoney Curtis Band Live, se trata de una producción que de seguro encantará a todos los amantes de propuestas como las de Hendrix, Cream, Stevie Ray Vaughan o Robin Trower. Estamos en presencia de la clásica grabación de un power trio, que se mueve por los terrenos del blues rock. Con una formación en la que aparecen Stoney Curtis como guitarrista y vocalista, Steve Evans al bajo y Aaron Haggerty como baterista, ellos tres tuvieron como productor de este CD a Mike Varney, un verdadero cazador de talentos y que en la segunda mitad de los años 80, mantuviese una columna periodística en la revista Guitar Player, que (como he dicho en más de una ocasión) fue fuente de inspiración para el surgimiento de Los que soñamos por la oreja.
En el que es su tercer trabajo discográfico, la Stoney Curtis Band pone a nuestra disposición 11 muy bien facturados temas, en un repertorio que abarca no solo el blues rock, sino que va desde cortes con aires de rock sureño hasta otros de clara definición en los códigos del hard rock setentón. Piezas como Last Train to Chicago, Evil Women, American Lady o When the Sweet Turns to Sour, transmiten vibraciones enérgicas a raudales y demuestran el virtuosismo guitarrístico del que hace gala en toda la grabación Stoney Curtis.
La segunda propuesta a la que deseo referirme es a la protagonizada por Joseph Arthur, típico representante de lo que en habla inglesa se conoce como un songwriter, equivalente al término de cantautor en español. Nacido el 28 de septiembre de 1971 en Akron (Ohio), él fue captado en 1996 por Peter Gabriel para que perteneciese a su compañía discográfica Real World, sello con el que graba varios álbumes. De entonces a acá, Joseph Arthur ha editado nueve CD y 11 EPs, con una música que se mueve entre el folk y el country rock alternativo.
Tras la publicación a inicios del pasado 2012 del disco Redemption City, en el propio año ve la luz el fonograma titulado Junkyard Hearts, concebido a partir de cuatro EPs editados en 2002. Álbum doble con 19 canciones, el material que prevalece posee fuerte acento en lo guitarrístico, desde el punto de vista instrumental, y un regodeo en lo melancólico de las líneas melódicas y las atmósferas sonoras diseñadas por el cantautor. Cortes como The Coldest Sea, Jumping in with you, Tiny Echoes, Voices Will Fight y Still The Same, tienen la virtud de que después de escucharlos, de algún modo siguen sonando en nuestra cabeza.
Finalmente, voy a referirme al fonograma Ed Calle plays Santana, un tributo que este saxofonista venezolano rinde al notable guitarrista de origen mexicano. Figura que lo mismo abarca los terrenos del jazz latino que los del pop, aquí Ed echa mano a un conjunto muy conocido de piezas de Santana y en los arreglos pone énfasis en el costado latino de dicho repertorio, aunque sin exagerar, lo cual es un acierto.
Temas como Evil Ways, Europa, Oye como va, Samba pa’ti o Black Magic Woman suenan en este disco a tono con lo que internacionalmente se conoce como smooth jazz. Además de Calle, quien se desempeña en varios saxofones, teclados, flauta y el EWI con la maestría que le es característica, intervienen aquí el trombonista John Kricker, Jim Hacker en la trompeta, Ahmed Barroso en la guitarra acústica, Omar Hernández en el tres, la guitarra y el bajo; Gilberto, «Pachy», García en voces, y Ricardo Eddy Martínez, «Edito», en teclados, programación y coros. En fin, he aquí tres discos que, desde la variedad propositiva de cada uno de ellos, recomiendo escuchar con suma atención. Les aseguro que no se van a arrepentir.