Frente al espejo
«Me gustó mucho la entrevista con la periodista Leticia Martínez, corresponsal de Granma en Haití (Respuestas desde el infierno de este mundo, Alina Perera Robbio, 2 de febrero), por las cosas que no puedo ver y me transmite a través de este medio.
«La verdad es que en ocasiones hemos de vivir amargas experiencias para aprender a valorar lo que tenemos, y darnos cuenta de que para ser felices no hacen falta las cosas materiales. No hay nada más lindo y maravilloso que abrir los ojos ante un nuevo día al lado de nuestros seres queridos. Solo quisiera pedir que sigan compartiendo esas experiencias. Aunque en estos momentos no son edificantes las imágenes a mostrar, creo que es la única forma que tenemos de vivir este terrible atentado de la naturaleza». (Carmen Rosa)
«Pepe: Hermoso tu comentario Lo que Coralita vio (José Alejandro Rodríguez, 2 de febrero). Hay un pequeño fragmento que quiero destacar: “Los padres, aun cuando parten, siguen aferrados a los hijos, acompañándolos en el azaroso camino de la vida, como fuegos que despejan las sombras”.
«Quienes tuvimos padres sacrificados y esforzados por nosotros, no pasa un día sin que evoquemos un recuerdo agradable o un pensamiento nostálgico por ellos. Las costumbres cambian con el transcurso del tiempo, pero hay valores que deben perdurar por los siglos de los siglos. Uno de ellos es amar y respetar eternamente a nuestros padres. Los que somos padres tenemos la obligación de desempeñar excelentemente la responsabilidad que la vida nos brinda hasta el final de nuestros días». (Davo)
«Como tantos y tantos cubanos que les ha tocado estudiar lejos de casa, también conozco los rasgos de esa autopista, el sol, la lluvia… (Desconocido, Nyliam Vázquez, 27 de enero). Pero tienes razón: por difícil que sea, muchas veces aparece alguien, y salva el día. A todos ellos, gracias. Y a ti, por recordar que no todo está perdido: hay muchos corazones con algo para ofrecer… sin nada a cambio que pedir». (Yarisbel García Quintana)