Frente al espejo
«Gracias, profesor Luis Sexto. Al leer La decencia confundida (sección Coloquiando, 11 de septiembre) sentí en el aura “La estrella que ilumina y mata”, y miré al cubano que soy y al que quiero ser. Somos diversos hacia adentro, en la dignidad, el sentido de la vida, las pasiones y ambiciones individuales, que resguardadas en lo más profundo del ser gozan de total libertad, esperando el momento de la revelación: la conducta. Si existiesen diferencias entre los hombres tuvieran su base en el pensamiento, el discurso y la conducta. Están los que piensan, dicen y actúan de la misma forma y esa es la virtud. Martí esboza los planos y las vistas del decentómetro para que lo hagamos entre todos para el bien de todos». (E. Valdés)
«Los niños en las escuelas de Guatemala conocen bien la letra del Himno Nacional y la vida del autor de esa letra, pero los maestros lo comunican a sus estudiantes y hablan de un poeta cubano que amó a Guatemala y a toda América Latina (José Joaquín Palma, poeta del fuego y del corazón, Osviel Castro Medel, 11 de septiembre). A Guatemala también le cabe el honor de haber tenido como maestro en el Instituto Nacional de Varones al Apóstol de la Libertad José Martí… Además de Palma y Martí, en tierras guatemaltecas estuvo el Che Guevara compartiendo los logros de la Revolución bajo la dirección de Jacobo Arbenz, y yo, como Benedetti, aclaro que el Che Guevara no es una camiseta de colores sino un proceso de los pueblos». (Gil Zu, Escritores Emigrantes en México, Grupo Sakeri)