Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

El pasado 21 de julio, Ray Charles Mederos Alfonso, operador de la central eléctrica fotovoltaica del Parque Solar Fotovoltaico Expocuba, en La Habana, adscrito a la Empresa de Fuentes Renovables de Energía (Emfre), alertó aquí que sería sancionado por un robo de unos cien metros de cable, cometido en su turno de trabajo, y detectado por él mismo en recorrido por la instalación.

Él afirmaba que rápido avisó a su jefe inmediato, a la dirección de la Empresa y lo reportó a la Policía por el 106. Y al entregar su turno de trabajo hizo la denuncia en la estación de la PNR en el reparto Capri.

El parque, decía, con 24 000 metros cuadrados, no cuenta con la seguridad requerida y hay problemas de iluminación, pues de 18 lámparas funcionan cinco. Y la protección del mismo está a cargo de una sola persona, el operador de turno.

«Y ni dentro del manual ni en mi contrato de trabajo —señalaba— se dice que el operador es el custodio del parque, ya que dentro de la operación hay varias funciones que son la chapea de las áreas, atender y detectar alguna anomalía durante el proceso de la generación, los recorridos antes expuestos, informar durante el día los picos de generación al despacho territorial de carga y al centro de dirección de la empresa; todas estas tareas para que las realice una sola persona».

Añadía que en mayo un compañero de trabajo fue víctima de un robo en el parque, y la medida fue separación del puesto de trabajo. Y confesaba que él mismo había sido sancionado dos veces antes por la chapea, debido a que en el parque no cuentan con los medios suficientes para asumirla, y la mayor parte del tiempo se hace a machete. Y abogaba por «el custodio que tanto necesitamos».

Y responde Ricardo Mangana Pérez, director general de la Empresa de Fuentes Renovables de Energía, que según la Resolución 296 del 1ro. de agosto de 2017, firmada por el entonces director de la Unión Eléctrica (UNE) Nicolás Liván Arronte Díaz, el operador de turno es el responsable de la guarda y custodia de todos los elementos del parque solar fotovoltaico, y entre sus contenidos está el de realizar el control de la maleza (poda y chapea con medios manuales o mecanizados de áreas verdes: limpia y recoge la hierba, desechos y cualquier tipo de basura).

Precisa que en el listado de activos fijos tangibles del parque se incluyen cuatro cortadoras de césped, las que en estos momentos están rotas por el descuido y maltrato por parte de los operadores, y la Empresa les ha garantizado la reparación de estas en más de tres ocasiones, además de garantizarles machetes.

Expresa que Ray Charles ha incumplido en varias ocasiones sus funciones laborales: Se le aplicó una vez multa del 15 por ciento del salario básico de un mes por enyerbamiento del área que le correspondía chapear. Y en agosto de 2010 se le aplicó multa del 25 por ciento de su salario básico por enyerbamiento del área que, igualmente, le correspondía atender. Se le hizo también un análisis el 22 de octubre de 2019 por el robo de un reflector del alumbrado exterior del parque en su turno de trabajo, en el horario de la madrugada.

Agrega que al trabajador se le han realizado varios señalamientos por incumplir con la chapea. Por lo que en cinco ocasiones trabajadores y directivos de la UEB La Habana y de la Emfre han realizado la chapea de las áreas verdes, debido a su incumplimiento.

Y en cuanto al robo referido por Ray, plantea que el 28 de junio pasado, aproximadamente a las 7:00 p.m. y al dejar de llover, en un recorrido que estaba previsto para las 4:00 p.m., el trabajador detectó la sustracción del cable, y que en la cerca había un agujero.

Califica Mangana de «preocupante» que el cable haya sido sustraído en el pasillo central del parque a plena luz del día, y a solo diez metros de la casa de control. «Con solo abrir la puerta, indica, u observando por alguna de las ventanas del local donde permanece se vería a los infractores del hecho».

Y manifiesta que «esta violación es considerada como grave, ya que la negligencia ante el trabajo, la inobservancia y el incumplimiento de su deber en el caso, así como la falta de confiabilidad en el puesto que desempeña, afectó y provocó perjuicios a la entidad, y con ello a la economía del país. La sustracción de dichos cables de alimentación trajo como consecuencia afectación a gran parte del alumbrado exterior del parque».