Acuse de recibo
Hay tantos «escombros» y «desechos» de indisciplina en las arterias de la sociedad cubana que no asombra, más bien reafirma preocupaciones, la carta de Manuela Durán Rodríguez, desde Agua Dulce No. 173, entre Flores y San Benigno, en el municipio capitalino de Cerro.
Cuenta Manuela que un tremendo basurero siempre ha afeado la esquina de Flores y Agua Dulce. Y siempre los vecinos han culpado a Servicios Comunales por la tardanza o la irregularidad en recoger sistemáticamente la basura.
Pero hoy no es así, según Manuela. Gracias al completamiento de equipos en la ciudad, el carro de Comunales pasa hasta dos veces al día, recoge, y los vecinos, quienes ya no se acuerdan de sus quejas anteriores, siguen vertiendo en esa esquina, a cualquier hora, los desechos de las construcciones: escombros, tablas viejas, tazas sanitarias en desuso… Y no pasa nada.
«Con la conciencia de los vecinos no se puede contar, afirma, pues son los violadores de lo establecido por
su propia comodidad. ¿Y qué papel juegan, para hacer cumplir la ley, los presidentes de los CDR, la FMC, los militantes del Partido y la UJC, los delegados del Poder Popular, el médico de la familia, el jefe de Sector de la Policía y los famosos inspectores?».
Refiere la remitente, a modo de ejemplo, que el pasado sábado 11 de enero, a las ocho de la noche, pasó la palita con el camión y recogió todo lo que desbordaba esa esquina. Y al día siguiente, a las tres de la tarde, un vecino vertió en el lugar todos los escombros de su obra en construcción, con tremenda tranquilidad. Y no ha pasado nada…
En ocasiones similares, Manuela ha llamado a los inspectores. ¿Qué le han dicho? Que ellos no pueden pararse en la esquina a esperar por la violación manifiesta. Que si pasan y de casualidad ven a alguien botando escombros, entonces lo multan.
«¿Dónde está la campaña de comunicación, que se anunció que se iba a poner en práctica para que la población supiera los horarios de sacar la basura? ¿Qué hacer con los desechos de las construcciones? ¿Y las multas a indisciplinados?
«No basta con recibir equipos nuevos si todos los factores no se unen para poner fin a la indisciplina y a la impunidad. Si no nos unimos todos, dentro de poco los equipos recibidos no servirán, y la basura seguirá pululando y creciendo en nuestras calles. Hay que hacer algo para matar ese mal de raíz», concluye Manuela.
Aridaiselys León León (Fidelidad s/n, entre Carretera Central y Sábalo, Guaracabulla, Placetas, Villa Clara) cuenta que fue damnificada del huracán Irma, en septiembre de 2017, con derrumbe total de su vivienda. Y desde entonces, está albergada con su esposo e hijo, en la mitad de la Casa de la Cultura de Guaracabulla.
Por decisión del Gobierno municipal, en noviembre de 2017 se le encargó la construcción de su vivienda a la cooperativa de crédito y servicios Luis Ramírez López hasta concluirla y entregarla.
«Pero hace cinco meses que no se trabaja, afirma, porque hay 32 sacos de cemento que se echaron a perder por negligencia de la entidad encargada, o por falta de supervisión de los responsables, que no trabajaron teniendo los materiales necesarios.
«Por otra parte, nadie ha venido a saber de esta obra, ni de cómo se estaba ejecutando. La responsable de la Vivienda por el Gobierno en Placetas, Ester Lidia, me dio como respuesta hace unos cuatro meses, que no había forma de reponer esos materiales. Que me visitaría para conversar conmigo y con los constructores. Todavía la estoy esperando.
«Parece que voy a tener que quedarme a vivir en esta Casa de la Cultura. Me siento muy afortunada porque esta Revolución y mi Presidente me hayan ayudado, pero no encuentro el camino de la solución para terminar mi casa, y liberar este espacio, que tanta falta le hace a este poblado», concluye Aridaiselys.