Acuse de recibo
El pasado 23 de febrero, y desde el reparto 1ro. de Mayo, en el municipio capitalino de Boyeros, Idelfonso Bárcena Gallardo denunció aquí que en diciembre de 2018 reportó un salidero de agua en la acometida de entrada a su vivienda, pero en la calle.
Y añadía que como el vertimiento había aumentado, y ya inundaba toda la calle, él se mantenía llamando semanalmente y siempre la respuesta era: Hay que esperar. «Es un crimen botar tanta agua…», expresaba Idelfonso.
Al respecto, el pasado 10 de abril recibimos la respuesta de Halina Guerra Castro, jefa del Departamento de Atención al Cliente de Aguas de La Habana, fechada el 25 de marzo. En la misma, informa que según la jefa de Aguas… en el territorio, Marlene Socarrás Jiménez, debido a los años de explotación y el deterioro de algunas redes existentes en ese extenso municipio, se generan a diario mayor cantidad de salideros que los posibles a suprimir.
Por ello, indica, se tomó como estrategia priorizar la supresión de aquellos que conllevan a falta de agua, así como los de vías principales, con desvío de ómnibus, y los de mayor repercusión social. Y es por eso que se dilata la eliminación de algunos, como el de este caso.
Añade que se han rehabilitado los Consejos Populares Santiago de las Vegas y Nuevo Santiago, pero no se ha podido realizar lo mismo en todos los que componen el territorio en cuestión.
Refiere que el 1ro. de marzo quedó suprimido el salidero denunciado por Idelfonso. Y continuaban trabajando para acortar el ciclo de respuesta a los que surgen a diario. Agrega que se visitó a Idelfonso y se le explicó todo lo anterior.
Yeny Martínez Jústiz (Maloja 10, entre Águila y Ángeles, Centro Habana, La Habana) cuenta que desde marzo pasado su familia y otros vecinos en la cuadra están afectados severamente con el servicio de agua, y no saben el porqué.
Precisa que el jueves 11 de abril fue a las oficinas de Aguas de La Habana en el municipio y se entrevistó con Mariela, la funcionaria que atiende las quejas de la población, quien le dijo que al siguiente día reportaría una pipa de agua. Pero esta nunca llegó: ni el 13 ni el 14.
El lunes 15 de abril y el martes 16 Yeny llamó, y Mariela le dijo que no había podido hablar personalmente con la directora de Aguas... allí, y le dejó un papel, notificándole el problema.
Cuando Yeny volvió a llamarla, le dijo que no estaba incluida en el «plan de pipas», conociendo que está embarazada y tiene una niña de tres años.
¿Qué hay que hacer para estar en el «plan de pipas»?
René Luis Páez Caballero (Luco 3551/2, entre Arango y Municipio, Luyanó, 10 de Octubre, La Habana) cuenta que desde hace 25 años hay un salidero de agua potable en Justicia, entre Arango y Municipio, en ese barrio, que está afectando a varias viviendas, penetrando al subsuelo y corriendo por la zanja pegada a la acera.
Afirma que los vecinos tiene ya un «expediente» de todas las quejas y gestiones realizadas. Han ido representantes de varios organismos, pero el agua sigue despilfarrándose.
«¿Hasta cuándo esta indolencia de malgastar agua, y por ende petróleo para bombear durante tantos años. ¿Quién resolverá el problema?», cuestiona René Luis.
Y Omar Pino Quintana cuenta que en su cuadra, en la avenida 8, entre 13 y 17, en el municipio matancero de Jovellanos, hay dos salideros de agua hace cinco años.
«Por aquí pasan funcionarios. Yo oigo a Raúl y a Díaz-Canel decir que debemos ahorrar, y parece que a esos señores no les interesa», concluye el remitente.