Acuse de recibo
Hace tiempo que no recibimos información oficial actualizada sobre la marcha del programa de sustitución de equipos electrodomésticos, a pesar de las inquietudes y la incertidumbre que tienen al respecto muchos ciudadanos sobre deficiencias y descontroles en esa tarea.
Juana Magaly Rodríguez (avenida 39 No. 3418, Playa, La Habana) cuenta que el pasado 25 de marzo se inició el cambio de los aires acondicionados en su barrio, e increíblemente no aparecía su nombre en el listado o modelo por el cual se rige Comercio, el cual le fuera entregado por los Trabajadores Sociales del municipio a partir del censo que se había realizado.
En el censo de la circunscripción 85 de Playa, hecho por los Trabajadores Sociales con el concurso de los CDR, Juana Magaly aparecía en el segundo renglón del listado. ¿Entonces por qué ahora no?
Ella inició gestiones que aún no tienen resultados: En la dirección municipal de los Trabajadores Sociales le dijeron que no tienen autoridad para conseguir que el área de Comercio la reincorpore al listado, a pesar de que Juana Magaly figuraba en el censo inicial, y para que se reconozca que en su caso hubo un error, presumiblemente por falta de conciliación previa antes de entregar la información al MINCIN.
Ella fue a la instancia provincial de los Trabajadores Sociales, y allí le comunicaron que no podían solucionar el problema. Fue a la sede nacional de los Trabajadores Sociales, y allí contactó con el funcionario Lorenzo, quien la citó para la dirección de esa organización en Playa.
Lorenzo confirmó lo expuesto y el error cometido. Se comprometió a buscar solución. Pero desde entonces, afirma la señora, las respuestas del mismo no le permiten creer en un feliz desenlace. Para mayor confirmación de ello —sostiene—, el 3 de abril le informaron que la solicitud de aprobación había que someterla a la consideración de las máximas autoridades del Ministerio de Comercio Interior.
La afectada pregunta: «Un error comprobado por la propia organización responsable y verificado por su nivel supremo, ¿no puede tener una solución ágil, y debe ser elevado a un jefe de organismo para ello? ¿Cuánto tiempo más debo esperar y por qué vía me enteraré? ¿Quedarán equipos para entonces?».
Elba Ronda (Calle 21, entre 50 y 52, Playa, La Habana) fue en su cuadra quien, por el CDR, hizo en un inicio los listados de los equipos electrodomésticos para su sustitución, y se los entregó a la trabajadora social Yusnely. Y como tal, guarda copia de todo ese levantamiento.
Lo que no entendía Elba cuando me escribió el pasado 30 de marzo, y le parecía muy extraño, es que desde hacía cuatro días se estaba verificando esa relación como en una lista de espera: la gente se congregaba en calle 46 esquina a 29, donde se pasaba lista por la mañana, después de las ocho de la noche, y se volvía a rectificar a las 10:30 p.m.
«Allí se aglomeran más de cien personas, y si no estás en la lista, te borran. La delegada de la circunscripción 81 me informó que citara a las personas que estaban en la lista de la cuadra, para entregarle el bono para adquirir los aires.
«¿Y qué se encontraron? Un molote de personas. Había que apuntarse y volver al pase de lista. Dicen los vecinos que parecen las colas de cuando vendían los juguetes dirigidos y adicionales. Además, allí va gente que no está en las listas, y dos personas de mi cuadra que fueron informadas a la trabajadora social en su momento, no aparecen en el listado».
Elba aclara que ella no solicitó aire ni está desde un principio en los listados; pero, con lógica desconfianza, cuestiona:
«¿Quién orienta esto? Estoy asombrada por tanta desorganización y el descontento que trae. Como usted sabe, a río revuelto… Si se tienen los números y los nombres de cada persona, y para los aires no son tantas las solicitudes, ¿por qué no se hace de forma organizada? ¿Quién busca dicho relajo?».