Acuse de recibo
Hoy se despeja la incógnita de lo que sucedió el pasado 25 de julio en San Antonio de los Baños, cuando en la presentación de una agrupación musical alguien impúdicamente vociferó ante el micrófono soeces estribillos que herían los oídos.
Fue el lector Ricardo López Ledón, vecino de la Villa del Humor, quien se tomó muy en serio la afrenta y denunció el 30 de agosto pasado en esta columna aquella bofetada a las buenas costumbres de lo que él calificaba como un grupo reguetonero (¿será que algunos creen obsoleto lo de las buenas costumbres?).
A propósito, nos escribe Noel Soca García, director de Cultura en la provincia de La Habana, quien confirma los hechos y precisa detalles: no fue un grupo de reguetón el que se presentó, sino la orquesta salsera Caribe Girls, perteneciente al Centro Provincial de la Música Antonio María Romeu.
Apunta Soca que se ha hecho costumbre en las presentaciones masivas de grupos musicales la interrelación con los bailadores. Así, es natural que del público suban algunos y dialoguen musicalmente con los intérpretes. En este caso la nota la dio un individuo «en nota», pasado de tragos. Y las groserías de la controversia «nunca fueron palabras obscenas, pero sí con un doble sentido muy fuerte», afirma el funcionario.
Argumenta Soca que, en ese instante, aun con las constantes evasivas de la vocalista de la agrupación a aquella manifestación, no se alejó al intruso del escenario de forma brusca, para evitar un incidente. Y agradece el alerta de Ricardo, que los ayuda en su propósito de brindar al pueblo un producto cultural elevado.
«La Dirección Municipal de Cultura —señala— ha tomado a partir de este momento todas las medidas para que a ninguna persona del público se le haga entrega del micrófono en este tipo de actividades, y así evitar que hechos como este puedan repetirse».
Agradecemos la atención al caso, convencidos de que la decisión de Cultura en San Antonio de los Baños debe extenderse al universo del país, porque se oyen cada cosas... públicamente y en nombre de la música. ¡Pobre música! Cualquiera no merece un micrófono.
Cercados por la indisciplinaEn principio fue el impune robo de un tramo de cerca perimetral en el Hospital Clínico Quirúrgico de 10 de Octubre, en la capital. Sí, porque hay personas en este país que, a la sombra del descontrol y «la vista gorda» de otros, desarticulan y «canibalean» para su provecho cualquier propiedad pública. Hasta el mismísimo Capitolio si pudieran.
La denuncia la hizo aquí el pasado 30 de agosto la lectora Verónica Milagros Peñalver, vecina de ese centro asistencial, quien revelaba que a partir del hurto de la cerca, además de convertirse en trillo de acceso de cualquier persona a las áreas del hospital, el área devino vertedero de basura, justo al fondo del pabellón Pérez Pérez, de Geriatría.
Responde al respecto Yanet Noda Espino, vicedirectora para la Batalla de Ideas de la Dirección de Salud de Ciudad de La Habana, quien precisa que a raíz de lo publicado se pudo comprobar que era veraz la queja de Verónica Milagros. Se decidió por parte del hospital erradicar el vertedero, con el apoyo de los vecinos y sus organizaciones, así como impedir que se reproduzca. Y se acordó que los trabajadores del hospital reparen la cerca.
Saludamos la resolución de erradicar el problema y la causa que lo origina. Habría que agradecer primero a Milagros Verónica, que distinguió a tiempo la dificultad y se preocupó. ¿Es que la dirección del hospital no lo percibía? ¿Qué gestiones había hecho para enfrentarlo, si aquello permanecía impune, abierto a la indisciplina?
El expediente no existíaTras Ike y Gustav, que tantas viviendas destruyeran, y sopesando que los recursos de ese tipo están volcados a la rehabilitación, esta columna ha sido parca en materia de demandas en tal sentido. Pero la respuesta que brinda hoy Archy F. Lam, director de Vivienda en la provincia de Holguín, corresponde a un caso reflejado aquí antes de la tragedia, exactamente el 9 de agosto pasado.
Entonces, Mirlenis García, de calle 26 número 2, en Rafael Freyre, en esa provincia, contaba que tiene licencia de construcción desde hace ocho años, y ante el dictamen técnico de su inmueble, en el Poder Popular le comunicaron que le entregarían materiales a partir de 2008.
Después de seis meses de espera, Mirlenis fue al Poder Popular, donde, según sus palabras, le dijeron que su expediente había desaparecido y ya no figuraba en el plan. La mujer cuestionaba seriamente la pérdida y que hubieran hecho oídos sordos de su caso.
Al responder, Lam aclara que «la única entidad competente para vender materiales de construcción a la población es la EMSSV municipal (no aclara qué significa la sigla); y solo puede hacerlo cuando la Unidad Municipal Inversionista de la Vivienda (UMIV) le entrega el expediente de obra con su carta límite». Y precisa «La UMIV confecciona esos documentos a solicitud del interesado, una vez que este presente la boleta que acredita que ha sido seleccionado por una de las tres vías existentes: acuerdo del Consejo de la Administración Municipal, en asamblea abierta de trabajadores en el caso del Plan CTC, o por la Comisión de Selección de la Circunscripción».
A raíz de lo publicado, señala, investigaron el caso y comprobaron que la señora posee un dictamen técnico de la UMIV de Rafael Freyre y una licencia de construcción desde hace ocho años, pero nunca ha estado en ningún plan constructivo. «En cuanto al supuesto expediente perdido —apunta—, podemos decirle que es imposible, pues no puede extraviarse lo que no ha existido.
«Después del paso del huracán Ike —manifiesta—, esa vivienda está reportada con una afectación total de techo, y Mirlenis recibirá el tratamiento para esos casos. Comprará los materiales que le sean asignados, cuando le corresponda a su circunscripción, para recuperar su vivienda».
No quiero concluir sin antes informarles a nuestros lectores que mi compañero de esfuerzos en esta columna, el joven periodista Jesús Arencibia Lorenzo, quien la redacta los sábados, estará unos cuatro meses fuera de esta faena, por encontrarse en un importante curso como parte de su preparación como profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana. El sábado estaré también con ustedes, hasta el retorno de Jesusito.