Acuse de recibo
Las autoridades de la Universidad Central de Las Villas (UCLV) aseguran que impedirán se repitan irregularidades en el pago del estipendio estudiantil, y la liquidación de vales de pasajes, denunciadas aquí el pasado 4 de diciembre de 2007 por el estudiante de ese centro docente, Arnaldo Mirabal Hernández.
Entonces, Arnaldo enumeraba los principales tropiezos en tal sentido: en ocasiones no hay dinero para el estipendio; y en otras, cuando llega, hay alumnos que no aparecen en las nóminas. A los alumnos ayudantes muchas veces no les pagan las ayudantías. Lo otro es el laberinto de obstáculos que presentan para que les devuelvan, a manera de reembolso, la mitad del gasto en pasaje por transportación.
Al respecto, responde José Castellanos Castillo, vicerrector de la Universidad Central de Las Villas, que desde septiembre hasta noviembre de 2007 «se presentaron deficiencias en la calidad de los servicios del área económica de la UCLV... lo que indudablemente ha provocado afectaciones a los estudiantes y trabajadores».
Explica Castellanos que allí se realizaba el pago del estipendio mediante un sistema informático propio de esa Universidad, el cual obtiene los datos, a su vez, de otro para la matrícula, en operación desde hace siete cursos. Pero este último fue sustituido por uno nuevo en septiembre pasado.
«Con la introducción del nuevo sistema informático de matrícula, subraya, el de pagos de estipendios dejó de operar. Se comenzó la búsqueda de una alternativa automatizada, pero la falta de previsión de la Vicerrectoría Económica no permitió lograrlo oportunamente».
Precisa que ante la imposibilidad de lograr la utilización del sistema, se decidió procesar la información de forma manual, «decisión que resultó tardía, dado el volumen de pago que se realiza en el centro, y las diferentes subvenciones que incluye».
Ello provocó que se comenzara a pagar a partir del 29 de octubre, y se concluyera en el mes de noviembre. Y a lo anterior se unieron dificultades con la calidad de la documentación presentada por el área económica a la Tesorería Municipal para la extracción del efectivo, y problemas en la Tesorería con la disponibilidad del centro, por dificultades con la operación de su sistema informático.
En cuanto a los fallos en el pago del pasaje, de acuerdo con lo establecido nacionalmente, ese reembolso se ejecuta con el fondo de la propia Caja del centro, el cual resulta insuficiente «para dar respuesta al incremento que se ha experimentado en el nivel de operaciones». Ello provoca que en ocasiones no se disponga del efectivo para el pago de esos pasajes. Tal asunto, asegura Castillo, ha sido gestionado con la agencia bancaria, y se logró la aprobación del incremento propuesto por la UCLV, «con lo cual debe quedar resuelta la situación».
Refiere el Vicerrector que durante el tiempo en que se han manifestado tales irregularidades, la dirección de la FEU en la UCLV mantuvo una atención sistemática al problema. Y reconoce que la información por parte de la dirección administrativa a estudiantes y trabajadores no fue efectiva, «lo cual demuestra que es necesario seguir incrementando el trabajo con nuestros estudiantes y el nivel de información a los mismos».
Finalmente, manifiesta que lo acaecido motivó «un análisis profundo en la estructura de dirección de la UCLV, juntamente con la dirección de las organizaciones políticas y de masas del centro, así como de las responsabilidades de cada compañero, para impedir que se repitan situaciones como esta».
Agradezco la respuesta del Vicerrector. Es sumamente importante que no se repita tal historia, porque es un alerta de que, en cuanto a derechos tan inalienables del estudiantado, refrendados en el último Congreso de la FEU, no puede haber improvisación ni falta de previsión ante las consecuencias de, por ejemplo, un cambio de sistema informático, o las nuevas realidades que impone el aumento en la cuantía del reembolso por concepto de pasajes a los estudiantes.