El camino blanco de los mayas. Autor: Tomado de Internet Publicado: 07/03/2020 | 05:01 pm
Un grupo de científicos de la Universidad de Miami (EE.UU.) han explorado con moderna tecnología láser una carretera de piedra de 100 kilómetros construida por los mayas y que hace trece siglos conectaba las antiguas ciudades de Cobá y Yaxuná en la Península de Yucatán.
El estudio, publicado en el Journal of Archaeological Science, es la primera investigación de la «autopista» maya con tecnología 'LiDAR', consistente en un láser que escanea profundamente el suelo incluso a través de la espesa vegetación, revelando la topografía del terreno, así como cualquier característica artificial.
Lo que hicieron fue disparar pulsos de luz láser desde el aire hacia la superficie y medir el tiempo que tardaba el rayo en rebotar.
Así, a partir las diferencias de tiempo de rebote y las longitudes de onda de la luz, los investigadores crearon mapas digitales en 3D para revelar las construcciones escondidas bajo la vegetación.
Esta herramienta ha permitido a los científicos estudiar mejor el «sacbé» —como se conocían los caminos empedrados elevados construidos por los mayas y significa camino blanco en esta lengua)— e identificar más de 8 000 estructuras de diferentes tamaños ocultas por árboles a lo largo de la carretera, con un volumen total suficiente para llenar aproximadamente 2 900 piscinas olímpicas.
La investigación confirmó, además, que el camino, que mide unos 8,5 metros de ancho, no es una línea recta, como se suponía, sino que se desvió para incorporar pueblos y ciudades preexistentes entre Cobá y Yaxuná, conectando «a miles de personas que vivían en la región intermediaria», explica en un comunicado la arqueóloga Traci Ardren, autora principal del estudio.
«El 'LiDAR' realmente nos permitió comprender el camino con mucho más detalle», ayudando a «identificar muchos pueblos y ciudades nuevas a lo largo del camino, nuevas para nosotros, pero preexistentes», expresa Ardren.
Los investigadores creen que la carretera fue construida poco antes del año 700 por orden de K'awiil Ajaw, poderosa dirigente de la ciudad de Cobá, y que fue «uno de los últimos esfuerzos de Cobá por mantener su poder» ante el ascenso de la