WASHINGTON, noviembre 8.— Científicos estadounidenses encontraron dos genes que ayudan a acelerar la regeneración de tejidos en ratones de laboratorio, lo que abre nuevas posibilidades para detener el envejecimiento, informa el sitio Russia Today.
Según investigadores de la Escuela Médica de Harvard y la Universidad de Texas, los genes denominados Lin28a y IMP1 son muy activos en los niños, pero su acción disminuye con el tiempo, lo cual podría explicar por qué las personas jóvenes se curan más rápido que las mayores.
«Nuestros estudios apoyan el concepto de que la reparación de tejidos de mamíferos puede mejorarse sustancialmente mediante la ingeniería de la reactivación de los genes, que regulan las etapas de desarrollo juvenil», explicó George Daley, uno de los autores de esta investigación.
Estudios previos señalan que todos los animales envejecen de forma similar, lo cual se traduce para la medicina en nuevas oportunidades para tratar, específicamente, las enfermedades causadas por el proceso de envejecimiento, destaca PL.
El estudio genético de este proceso natural de los seres vivos comenzó con el análisis de un gusano microscópico denominado Caenorhabditis elegans, en el cual los científicos descubrieron un gen que se encarga de dar órdenes para la producción de una proteína y sus receptores.
La reducción de la actividad de esta proteína, conocida en biomedicina como DAF-2, produjo que la expectativa de vida del organismo llegara al doble de lo normal.