WASHINGTON.— Una mujer desfigurada por un chimpancé hace dos años espera volver a poder ingerir alimentos sólidos y no ocultar su rostro a nadie más, después de una cirugía reconstructiva, informaron médicos de un hospital de Boston.
La paciente, llamada Charla Nash, fue atacada por el simio, mascota de un amigo, que le cercenó la nariz, labios, párpados y manos, por lo que durante dos años no pudo ingerir más que purés y líquidos.
Ahora la mujer espera poder comer hamburguesas otra vez y llevar una vida lo más normal posible.
Alrededor de 20 horas duró la cirugía: naríz, músculos, dientes y labios fueron devueltos a la mujer.
En principio también fueron transplantadas las manos, pero hubo que retirarlas porque la paciente se complicó con una neumonía, explicó Bohdan Pomohac, quien dirigió la intervención realizada por un equipo de 30 especialistas.
Su caso fue el tercer transplante de rostro exitoso realizado en Estados Unidos, esta vez en el Hospital Brigham and Women's, en Boston.
El primer transplante de cara en el mundo se realizó en Francia en el 2005 a una mujer, Isabelle Dinoire, quien recibió un tejido de un injerto facial de una donante declarada en estado de muerte cerebral.