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Sentir que todos somos Patria

Miguel Díaz-Canel Bermúdez sostuvo en la tarde de este martes emotivos encuentros con miembros de la comunidad cubana residente en Argentina y con el colectivo de nuestra Embajada en el país austral

 

Autor:

Alina Perera Robbio

BUENOS AIRES, Argentina.—«Como parte del proceso de fortalecimiento de las relaciones con nuestros nacionales en el exterior, aprovechamos este intercambio para anunciar que del 8 al 10 de abril de 2020 tendrá lugar la 4ta. Conferencia La Nación y la Emigración en La Habana». Fue la noticia dada por el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en un emotivo encuentro con miembros de la comunidad cubana residente en este amado país.

Ya estaba cayendo la noche de este martes, cuando el Jefe de Estado dijo a los cubanos que se dieron cita para sostener un encuentro con él, que con una confluencia como la 4ta. Conferencia, además de atender una solicitud recurrente de los cubanos en el exterior, expresada en los encuentros nacionales y regionales que tienen lugar anualmente en diferentes latitudes del planeta, «también estaremos dando un importante paso de avance en función de continuar fortaleciendo los vínculos entre Cuba y ustedes».

Tal cita, recordó el mandatario, dará continuidad a las conferencias La Nación y la Emigración, de abril de 1994, de noviembre de 1995 y de mayo de 2004, así como otras reuniones sostenidas, como fueron Cubanos contra la Ley Hemls-Burton, en enero de 1997, y otras marcadas por igual espíritu.

El Presidente, quien en sus palabras condenó la hipocresía de la administración norteamericana que en estos tiempos aprieta más la mano de hierro sobre el cuello de Cuba al tiempo de presentarse como defensora de los Derechos Humanos, convidó al grupo de cubanos residentes en Argentina a sumarse con energías renovadas en esta etapa para defender nuestra nación.

«Los esperamos en La Habana, dijo Díaz-Canel, teniendo en cuenta que la Patria somos todos; y como a todos, los convocamos a pensar en Cuba, a pensar como país, y a sentirse también que somos Cuba y somos continuidad».

Fue una noche que tuvo sabor de familia insular, en la que el mandatario contó sobre el trabajo que se desarrolla en la nación caribeña y sobre la agenda suya en el país austral.

Los hijos de Cuba, los que están físicamente lejos y mucho la extrañan, compartieron sus sentimientos, hicieron propuestas, y recordaron a esta reportera esa idea martiana de que, se dice cubano, y se abre un espacio en la mesa y un sabor de dulce hermandad toca el corazón.

Mientras se escribían estas líneas, otro encuentro con el Presidente había comenzado: un intercambio insoslayable con el colectivo de la Embajada nuestra en este hermano país.

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