Juan Jacomino, responsable de prensa de la Oficina de Intereses de Cuba en Washington dio declaraciones. Autor: Ismael Francisco Publicado: 21/09/2017 | 06:04 pm
WASHINGTON.- Ya hay trascendidos de lo que ocurre en la sala del Departamento de Estado donde se realiza la segunda ronda de conversaciones Cuba-Estados Unidos. Nos la hace llegar a las 11 de la mañana Juan Jacomino, responsable de prensa de la Oficina de Intereses de Cuba en Washington, cuando están a la mitad de la agenda las conversaciones de este viernes: «Se han acercado las posiciones sobre los aspectos a definir para el funcionamiento de las respectivas Embajadas una vez que se restablezcan».
Jacomino puntualiza el contexto: «El clima es positivo, constructivo y respetuoso».
En ese momento, el grupo que le escucha en esta salita de prensa improvisada en la cuasi centenaria casona de la Calle 16 –sede de la Misión cubana- incluía al periodista David Montgomery, del staff del importante diario The Washington Post, interesado en saber cómo trabajaba la prensa cubana que da cobertura a esta segunda ronda—,y medio en broma, medio en serio, uno de los colegas comenta: «¿Podemos decir que estamos ganando?». Al menos yo diría: vamos por buen camino.
En horas de la tarde, aproximadamente al filo de las cuatro hora de Washington y también de La Habana asistiremos a las prometidas conferencias de prensa que darán, por separado, las respectivas jefas de delegaciones: Josefina Vidal, directora general de la Dirección Estados Unidos de la Cancillería cubana, y Roberta Jacobson, secretaria asistente de Estado para los Asuntos del Hemisferio Occidental.
Estados Unidos también avanza información
Este viernes, pasado el mediodía, Jan Psaki, vocera del Departamento de Estado, en su briefing diario con la prensa estadounidense, reconoció que la política de 50 años contra Cuba no ha funcionado ni para los intereses de la seguridad nacional de EE.UU., ni para el pueblo de Cuba.
Aunque están en revisión en las conversaciones en Washington, sin embargo, subrayó que la revisión para eliminar a la Isla de la lista de países terroristas y el restablecimiento de las relaciones diplomáticas son procesos independientes.
También dijo Psaki que se sigue trabajando en el tema de la suspensión bancaria —que afecta desde hace más de un año las operaciones financieras de la Oficina de Intereses de Cuba en Washington y la actividad consular— pero apuntó que son instituciones independientes.
Habló, además, del impacto que este acercamiento puede tener para las relaciones estadounidenses con la región.
El Departamento de Estado de EE.UU. tiene su sede en el edificio Harry S. Truman, en la 2201 C. Street, en el área North West de Washington, a pocas cuadras de la Casa Blanca, en el barrio de Foggy Bottom. Es la secretaría que opera las misiones diplomáticas estadounidenses en el exterior y responsable de implementar la política exterior y su diplomacia que, en más de medio siglo ha sido de hostilidad y acoso hacia Cuba.
Depositario de más de 200 tratados multilaterales, el Departamento de Estado conversa ahora con la Isla para avanzar hacia un restablecimiento de relaciones diplomáticas, las que rompiera en enero de 1961.
Ese diálogo Cuba-Estados Unidos se lleva a cabo en el George C. Marshall Center, localizado en la entrada de la 21st Street del edificio Harry S Truman. Marshall, quien fuera general durante la II Guerra Mundial y se hizo famoso por su papel durante la Guerra Fría, fue también secretario de Defensa y Secretario de Estado de EE.UU.