El consumo moderado de alcohol protege contra ataques cardiacos sólo a los no fumadores, divulgaron hoy investigadores británicos, informa Prensa Latina.
Las personas que toman alcohol de forma moderada presentan un 40 por ciento de menos riesgo de sufrir un ataque cardiaco en comparación con los abstemios, revelaron científicos de la Universidad de Cambridge.
Ese efecto protector funciona sólo para aquellos que no fuman, aclararon los expertos, quienes analizaron a 22 mil 254 personas durante 12 años.
Los científicos consideran bebedores moderados a quienes toman uno o dos vasos pequeños de vino al día, en el caso de la mujer, y una cantidad ligeramente más alta para los hombres.
Entre esas personas se observó que las probabilidades de sufrir un ataque cardiaco decrecen 37 por ciento.
Sin embargo, entre los fumadores el riesgo de tener un infarto aumenta en la misma medida.
«Nuestros resultados podrían tener implicaciones de la salud pública y hacer que las personas entiendan los riesgos para la salud cardiaca de la combinación del cigarro y el consumo de alcohol», difundió Yangmei Li, autor principal del estudio.
El abuso de alcohol está asociado con una propensión mayor a la hipertensión.
Pero en cantidades moderadas puede reducir el riesgo de la acumulación de depósitos grasos en las paredes del vaso sanguíneo.