El país que acogerá en unas horas los Juegos Olímpicos ha asombrado a la humanidad a lo largo de la historia con ingeniosos inventos
Cuando se habla de Japón enseguida se piensa en tecnología. El país del Sol naciente le ha aportado a la humanidad numerosos inventos a lo largo de la historia, muchos de ellos con alcance global.
Tokio, la capital nipona, acogerá dentro de unas horas la 32da. edición de los Juegos Olímpicos, aplazada durante un año por la pandemia de COVID-19. Con los ojos del mundo puestos sobre el país asiático, hoy te invitamos a repasar varias creaciones salidas de allí.
Un autómata hecho de madera, que tuvo su mayor apogeo en los siglos XVIII y XIX, el karakuri podría considerarse como el abuelo de los robots, y su existencia explica el amor de Japón por la robótica.
El término karakuri se puede traducir como «aparatos mecánicos para producir la sorpresa en una persona», y se distingue por figuras que fueron empleadas en el teatro, festividades religiosas o como juguetes.
Su mayor tarea era la representación de mitos y leyendas tradicionales a través de sus movimientos, aunque existieron de todo tipo, como algunos que servían el té o lanzaban flechas con un arco. De estos últimos se conservan ejemplares que datan de 160 y 200 años de antigüedad. Y ya sabemos de dónde viene el amor por todo tipo de robots en Japón.
Los autómatas fueron muy populares en Japón desde el siglo XVIII. Foto:NeoTeo
Tal y como lo conocemos en la actualidad, el contestador automático de los teléfonos fijos fue creado en 1958 por el prolífico inventor japonés Kazuo Hashimoto. La idea no es original suya, puesto que desde 1898 el ingeniero danés Valdemar Poulsen había creado lo que llamó telegraphone, un aparato que grababa el sonido de las llamadas telefónicas.
Sin embargo, Hashimoto ideó el aparato que conocemos como contestadora, y en 1983 creó la primera de su tipo en formato digital.
La aparición de los teléfonos inteligentes y el uso masivo del buzón de voz ha hecho que las contestadoras pierdan relevancia, pero durante décadas la creación de Hashimoto permitió a millones de personas enterarse de los mensajes de familiares y amigos al llegar a casa.
El contestador automático fue ideado en 1958 por un inventor japonés.
En 1964 Japón sorprendió al mundo con el estreno de sus trenes de alta velocidad o Shinkansen, término que significa nueva línea troncal.
Esta red ferroviaria, extendida a lo largo de su geografía, conecta ciudades a velocidades de entre 220 y 360 kilómetros por hora.
Los también conocidos como trenes bala tendrán un sucesor muy pronto: los Maglev. Estos nuevos trenes emplean una tecnología de levitación magnética —de ahí su nombre—, que podría alcanzar velocidades superiores a los 500 kilómetros por hora.
Los sistemas japoneses de vías de alta velocidad para un tren han sido exportados además a países como China, y se emplean de forma general en todo el mundo desarrollado. Fue Japón quien dio el impulso.
En términos de formatos de video comercial, Japón se lleva las palmas. En 1975 Sony lanzó al mercado el sistema Betamax, una reproductora casera que tuvo su gran competidor un año después, cuando JVC presentó el formato VHS.
Eventualmente, JVC abrió su patente de VHS a otros fabricantes y eso hizo explotar el formato y su uso global.
Por otro lado, un grupo de empresas japonesas, entre ellas Sony, Hitachi, Matsushita, Mitsubishi y Toshiba, colaboraron para la creación del DVD, formato en disco que tuvo su apogeo a finales del siglo XX e inicios de este, y permitía almacenar todo tipo de datos.
Más tarde, Sony y Pioneer trabajaron de la mano para superar al DVD, y lo lograron con el Blu-Ray, sistema de almacenamiento en disco que permite mayor resolución y capacidad, presentado en el año 2000.
Dicen los entendidos en videojuegos que Super Mario Bros. vino a salvar a la industria en un momento de crisis. A inicios de la década de los 80 del pasado siglo los fabricantes de videojuegos se vieron en aprietos, pues el público había perdido el interés en ellos debido a su pobre factura.
Super Mario Bros. es considerado como un parteaguas en la historia de los videojuegos.
Sin embargo, Nintendo, compañía japonesa dedicada a los juegos desde 1889, decidió darle un chance al entretenimiento
electrónico y en 1985 lanzó Super Mario Bros., un título del género plataforma que revolucionó todo. El éxito de este y otros juegos afianzaría a Nintendo como rey de la industria durante años.
Nintendo tuvo una férrea competencia en Sega, otra compañía nacida en la tierra de los samuráis. Su mayor apogeo sucedió entre finales de la década de 1980 y la de 1990, hasta que entró un tercer competidor en la ecuación: Sony con su Playstation, en 1994.
Buena parte de la que se considera hoy la industria que más dinero genera en el mundo, tuvo sus mayores avances en Japón.
Esta podría ser una lista más extensa, pero es solo un acercamiento a una nación que algunos definen como «de otro planeta». Y es que los japoneses no paran de sorprendernos. Para muestra, un botón final: hace unas jornadas desde el Instituto Nacional de Tecnología de la Información y las Comunicaciones de Japón un grupo de científicos transfirió datos a 319 terabytes por segundo (Tbps). Esta marca supera ampliamente la de 178 Tbps establecida hace un año por ingenieros de Japón y Reino Unido.
Con 319 Tbps sería posible descargar 10 000 películas de alta definición de unos cuatro gigabytes cada una en tan solo un segundo. A lo mejor es Japón el que nos acaba de mostrar el futuro de la velocidad de transmisión de datos.
Japón acaba de romper el récord de velocidad de transmisión de datos con un asombroso 319 terabytes por segundo.