Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Aún sin llegar a los niveles deseados por la sociedad, es indudable que la modernización ha sido un proceso con avances palpables, como lo demuestra el hecho de que hoy la digitalización telefónica alcance un 96 por ciento de estos servicios, cifras que deben subir aún más con inversiones que se ejecutarán a lo largo de este año.

En encuentro con la prensa, la dirección de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), ratificó las intenciones de continuar trabajando para lograr la satisfacción de las necesidades del país en materia de telecomunicaciones, respaldando los planes de desarrollo social y económico que actualmente se ejecutan.

Actualmente existen en Cuba más de 300 000 usuarios de telefonía celular, a los cuales se suman los más de 7 400 que han contratado líneas desde que se autorizó su comercialización, según datos proporcionados por ETECSA.

A su vez, los planes de desarrollo prevén que en los próximos cinco años se llegue a más de 1,6 millones de usuarios de este servicio, para lo cual se han invertido cifras millonarias en el desarrollo de las infraestructuras necesarias, según Máximo Lafuente Vázquez, vicepresidente de servicios móviles.

Las inversiones se han destinado tanto para asegurar la disponibilidad de equipos y tarjetas prepagadas, como para extender la cantidad de radiobases necesarias para lograr una mayor «cobertura» de este servicio, que este año deben superar las 300.

De estas inversiones se han beneficiado ante todo personas e incluso entidades que hasta el momento no tenían acceso a la telefonía, muchas de ellas ubicadas en lugares de difícil acceso, quienes han accedido al servicio de Telefonía Fija Alternativa.

Esta modalidad permite, utilizando un equipo telefónico convencional, darle servicio con la modalidad de inalámbrico a muchos lugares, lo cual explica por qué hoy, según datos de ETECSA, el 68 por ciento del tráfico de la telefonía móvil lo representan estos usuarios, que por una módica cifra en moneda nacional, disponen de hasta 400 minutos mensuales de conversación.

Esa es la razón, según los directivos de la Empresa, por la cual la telefonía celular continúa con precios relativamente altos, necesarios para recaudar los recursos que se destinan a subvencionar el resto de las telecomunicaciones, cuyos precios se ofrecen en moneda nacional.

Los funcionarios de ETECSA explicaron que el costo de las llamadas de móviles a teléfonos fijos se mantiene, el minuto, entre los 0,60 a 0,50 CUC la salida, y 0,44 a 0,36 CUC la entrada, pues se cobra tanto al que reciba como al que emita la llamada.

En el caso de las conversaciones móvil-móvil el costo oscila en la salida de 0,50 a 0,40 CUC, y en la entrada de 0,44 a 0,36 CUC. Incluso, en los últimos tiempos de forma experimental no se están cobrando las llamadas que se reciben en los móviles provenientes del extranjero, lo que ha permitido incrementar este tráfico, pues diariamente se reciben como promedio más de 50 000 llamadas en los móviles originadas en el exterior.

Otro servicio de gran demanda y en auge creciente es el de los mensajes de texto emitidos entre móviles, cuyo costo está fijado en 0,16 CUC los que van a un celular nacional, y 1,00 CUC los dirigidos al exterior, pero solo se cobra la salida y no el recibo, lo que explica la popularidad creciente de este servicio.

Para activar una línea de telefonía móvil el costo asciende a 111 CUC, sin incluir el equipo ni el crédito prepago para efectuar las llamadas, mediante la compra de tarjetas cuyo precio oscila entre los 10 y 20 CUC.

Los celulares no son los únicos «inventos» que han llegado a la vida de los cubanos para quedarse. La digitalización telefónica, con la entrada a la palestra de servicios como el despertador automático, las contestadoras o el acceso a redes de datos, también se han convertido poco a poco en algo cotidiano para muchos.

Han requerido, eso sí, de un apertrechamiento tecnológico y una elevación de la calificación de los especialistas, proceso que está aún distante de concluir y que todavía tiene muchos aspectos en los cuales trabajar.

Si para la telefonía celular se habilitaron en una primera etapa 32 oficinas de comercialización del servicio, cifra que se espera elevar hasta unas 55 en el futuro próximo, estas forman parte de las 183 oficinas de gestión comercial que tiene ETECSA en todo el territorio cubano.

Quejas subsisten en relación con el trato, la facturación e incluso las soluciones a roturas o traslados, a pesar de la disminución del tiempo en el cual se solucionan.

Hilda Arias Pérez, vicepresidenta Comercial y de Mercadotecnia de ETECSA, reconoce que aún no se ofrece un servicio con la calidad requerida, que satisfaga las expectativas de la población, al igual que subsisten deficiencias en el proceso de atención y respuesta a las quejas, y no hay un sistema de gestión de usuarios integrado, ante la carencia de una base de datos única, lo cual explica muchas dificultades en la facturación, proceso que también pasa por los problemas que enfrenta la Empresa de Correos de Cuba, encargada de repartirla.

A todo ello se suman afectaciones en el servicio eléctrico, las inclemencias del tiempo, los fallos de la infraestructura e incluso delitos cometidos contra equipos y otros implementos telefónicos, que arrojan un cúmulo de dificultades que en el año 2007 rebasó las 3 000 incidencias.

Falta, igualmente, un mayor trabajo con el hombre, identificado por el ingeniero Eduardo Martínez Perdomo, vicepresidente de Operaciones de la Red de ETECSA, como el eslabón fundamental en el cual hay que influir, especialmente en la calificación y los valores humanos que deben caracterizar a cualquier trabajador telefónico.

Punto y aparte en el panorama de la telefonía cubana son los delitos e indisciplinas que hoy afectan a muchos servicios, especialmente a las llamadas «públicas», objeto de agresiones y roturas que incomodan e inciden a su vez en la economía.

Solo en 2007 se reportaron más de 500 hechos de este tipo, la mayoría en Ciudad de La Habana, Santiago de Cuba y Granma, en sucesos que van desde el robo o hurto de teléfonos públicos, y su rotura, hasta agresiones a cables, postes, sin contar los accidentes de tránsito que inciden a su vez en esta situación.

Ante ello, ETECSA, junto a las autoridades de la Policía, el Gobierno, el Partido y las organizaciones de masas, han desarrollado una fuerte campaña para detectar y neutralizar a estos infractores, que con sus actos dañan un servicio que es para todos.

Al cierre del año 2007 Cuba tenía en servicio 1 240 603 líneas telefónicas, sumados los móviles, los fijos alternativos, los básicos y las públicas. La cifra es todavía insuficiente, pero las inversiones para mejorar esta cobertura, asegura ETECSA, continuarán.

La red al día

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